Detrás de Al Machell hay algo más que un iluminado con ganas de protagonismo. En 2001 le extirparon un tumor cerebral. Según reconoce él mismo, sin la investigación de organizaciones benéficas como Brain Tumour Charity, su pronóstico no hubiera sido tan bueno.
Una semana después de que se le extirpara el tumor, recibió una llamada de su doctor diciéndole que el tumor era un tipo de cáncer especialmente agresivo y que requería de un tratamiento posterior con quimioterapia durante tres años, seguido de otro con radioterapia.
Sin embargo dos años más tarde, un análisis rutinario de sangre reveló que un alto índice de creatinina (un producto de desecho del metabolismo normal de los músculos que habitualmente produce el cuerpo en una tasa muy constante dependiendo de la masa de los músculos, y que normalmente filtran los riñones excretándola en la orina. Ese fue el primer indicador de que los dos riñones estaban fallando debido a una reacción tóxica adversa poco habitual por una de sus medicamentos de quimioterapia. A los largo de los seis años siguientes sus riñones se fueron haciendo cada vez más débiles hasta que llegó un momento que le comunicaron que debía hacerse un trasplante de riñón antes de seis meses o tener que someterse a diálisis.
Afortunadamente su hermana Helen era una combinación perfecta para ella y se ofreció voluntaria para donar. La operación se llevó a cabo el 15 de Abril de 2012 y fue todo un éxito.
Para Al Matchell, organizaciones benéficas como Kidney Patient Association (Asociación de Pacientes de Riñón) no sólo ayudan en la investigación de las enfermedades renales, sino también con métodos pioneros de tratamiento, incluyendo el uso de diferentes técnicas durante los procedimientos ( con trasplantes si es necesario). También controlan tratamientos que requieren atención a largo plazo (por ejemplo, diálisis) y ayuda a mantener a los pacientes lo más cómodo posible.
Por esa razón, y para que estas organizaciones continúen adelante, Matchell se propuso correr los 42 kilómetros de la Maratón de Londres con botas de esquí, para llamar la atención y que su causa sea conocida y de esta manera poder recaudar fondos para estas organizaciones benéficas. Su objetivo estaba en los 1.250 Libras esterlinas (unos 1.600 euros) los cuales ya ha logrado prácticamente gracias a unas 50 donaciones.
Tradicionalmente en la Maratón de Londres muchas personas tratan de recaudar fondos para actos benéficos. Hay quien ha llegado a correr los 42 kilómetros haciendo malabarismos con tres bolas en una mano. La nota negativa fue la muerte de uno de estos recaudadores, un soldado británico de tan solo 31 años que falleció de un infarto a pocos metros de la linea de meta. Trataba de recoger dinero para sus compañeros con lesiones de larga duración.
Este año la Maratón de Londres ha tenido una 'sucursal' en el espacio. Un astronauta británico completó la carrera a más de 400 kilómetros sobre la superficie de la Tierra sobre una cinta de correr y sujeto a cintas elásticas para neutralizar el efecto de la ingravidez. Tim Peake invirtió 3:35:21 horas en correr el maratón, un nuevo récord mundial en el Libro Guinness de los Récords en la categoría "el maratón más rápido en el espacio" superando las 4:24:00 horas que invirtió la estadounidense Sunita Williams en 2007, cuando se convirtió en la primera persona que completaba un maratón en el espacio corriendo en aquella ocasión el de Boston.
Desde el primer maratón de Londres en 1981, más de 57 millones de Libras se han recaudado para actos benéficos, y los mismos corredores mismos han recaudado otros 770 millones más para entidades benéficas a su elección.