Se trata del que cada año diseña y construye el ex-piloto de bobsleigh Silvio Giobellina. Este suizo cuenta con dos medallas de bronce, una de ellas conseguida los Mundiales (donde también se llevó un oro), y otra en los Juegos Olímpicos. Después de retirarse se dedicó a entrenar a la Selección Francia de Bobosleigh durante unos años, hasta que dejó su actividad como técnico y se decidió por iniciar una nueva aventura: montar un parque de nieve de toboganes.
Montado cada invierno junto a la estación de esquí suiza de Leysin, el año pasado logró atraer mas de 35.000 personas hasta sus instalaciones, compuestas entre otras, de nada menos que 11 toboganes construidos cada año desde cero, y que llegan a medir 300 metros de longitud. Para tirarse los participantes se suben hasta una plataforma de 5 metros de altura. Con todo, las velocidades que se pueden alcanzar son altas, de hasta 60km/h. Una vez abajo los participantes cogen su rueda o trineo y vuelven arriba tomando las diferentes cintas de transporte, la mayoría de ellas cubiertas con una capota. Para el próximo invierno se está montando una nueva, que con sus 117 metros de longitud, será la más larga de Europa, hablando siempre de las que tienen la capota Evolus para la protección de las inclemencias meteorológicas gracias a sus 117 metros de longitud. Quien no tiene un record, es porque no quiere!
La cinta más larga de Europa, de mas de 300 metros, está instalada en el Alpincenter, una estación de esquí cubierta de Alemania, mientras que la de más longitud de nuestro país la encontramos en Formigal, donde en 2008 se instaló una de 200 metros. En ambos casos el remonte no tiene capota.
Las cintas de transporte son la opción cada vez más escogida por los operadores de estaciones de esquí, ya que necesitan menos obras para su colocación y lo pueden tomar todo tipo de esquiadores, sea cual sea su nivel de esquí.