
Durante muchos siglos la mayoría de las grandes montañas fueron accesibles solo a unos pocos elegidos. Una élite que además de estar en buena forma, tenían el dinero para organizar expediciones o subidas a los picos más altos de la Tierra. La aparición de los funiculares y más tarde de los teleféricos, permitió que personas de toda índole y condición pudieran llegar hasta estas cumbres. La montaña se ha democratizado. Víctor Riverola, periodista especializado en montañismo y responsable de la productora Matterfilms, nos hace un repaso de la evolución del funicular a lo largo de la historia.
En los Estados Unidos se han inaugurado auténticas atracciones turísticas en lugares tan emblemáticos como pueden ser el Cañón del Colorado, "sin que de momento, se conozcan grandes polémicas", recuerda Víctor Riverola. Pero si que es cierto que los miradores espectaculares, accesibles con remontes mecánicos o transporte público, no dejan indiferentes a casi nadie. El mas difícil todavía lo han logrado en Suiza, con la instalación de un impresionante puente colgante en el Titlis (Engelberg) y en Francia, se ha inaugurado esta pasada semana una instalación en lo alto de l'Aiguille du Midi (3.842m) de un impresionante mirador construido íntegramente en cristal.
Hoy en día casi nadie se imagina una ascensión al Mont Blanc sin utilizar el TMB desde Saint Gervais al Nido del Águila, o el teleférico de la anteriormente mencionada, Aiguille du Midi, para iniciar la ruta del Tacul, Maudit, tal como nos afirma Víctor Riverola
En la península, dejando a un lado el cremallera turístico de La Rhune, que sube por Francia y los históricos cremalleras de Vall de Núria y Montserrat (los únicos de la península), los funiculares se concentran mas en las colinas de grandes ciudades que no en las grandes cumbres. En España hay actualmente 13 funiculares en funcionamiento: Gelida, St. Joan, Santa Cova, Montjüic, Vallvidrera y Tibidabo en Catalunya, Igeldo, Archanda, Reineta y Ereaga en el Pais Vasco, Cabrales, Bulnes en Asturias, Valle de los Caídos en Madrid y el del Río de la Pila en Cantabria.
El funicular más antiguo es el del Tibidabo en la Serra de Collserola, Barcelona, inaugurado en 1901 y el más reciente es el de Mamariga en Santurce, inaugurado en 2010. Casi todos los funiculares españoles se inauguraron durante la primera mitad del siglo XX, debido a la llegada del turismo y el aumento de la población en zonas con desniveles acusados. Los Pirineos no son los Alpes, y aunque las políticas de explotación turística puedan tener similitudes, sea por motivos económicos o políticos, el turismo de montaña pirenaico no ha llegado a los niveles alpinos, algo que enorgullece a unos y entristece a otros.
¿Hasta que punto el alpinismo y los deportes de montaña, motor de muchas economías en zonas de montaña, necesitan reclamos mecánicos para atraer inversión?. Es una pregunta que ha abierto desde hace años un interesante debate en varias zonas de Europa, donde la utilización de funiculares y teleféricos ayuda a atraer inversión y riqueza.
El Bürgenstockban es el primer funicular de tracción eléctrica inaugurado en Suiza. El funicular se construyó para poder subir turistas y clientes hasta el Palace Hotel que se encuentra situado junto a la estación superior, relativamente cerca de Lucerna. Junto al Palace Hotel, en la cumbre del Bürgenstock, los visitantes encuentran en la actualidad el impresionante y panorámico Park Hotel Resort, con un mirador panorámico excepcional, sobre el lago de Lucerna, y un centro de salud. El funicular realizó su primer viaje el 8 de Julio de 1888. Muy cerca encontramos el ascensor panorámico del Hammetschwand, otra de las maravillas de la técnica suiza. Se espera que el Bürgenstockban sea totalmente remodelado en 2015.
El funicular mas largo de Europa, que funciona con una mismo cable, es el que asciende hasta la cumbre del Niesen, en el Kandertal suizo, por encima del lago de Thun. Si hablamos de funiculares a través de la historia, es de justicia mencionar que si consideramos a Estambul como Europa (muchos libros de geografía e historia consideran Turquía como Asia), o por lo menos, si consideramos la parte europea de Estambul, como parte del continente europeo, entonces el funicular mas antiguo (y que sigue en activo) de Europa es el funicular de Galata, que funciona desde el 17 de Enero de 1875. El funicular de Galata es el primer funicular subterráneo del mundo y el que lleva mas tiempo funcionando.
Algunos analistas de la historia del ferrocarril en Europa coinciden al afirmar que el primer funicular fue el que conectaba la Rue du Terme con la Croix Rousse en Lyon (Francia) inaugurado el 3 de Junio de 1862, accionado por tracción vapor o el de Budapest, que estuvo muchos años sin funcionar, inaugurado el 2 de Marzo de 1870, pero por regla general, se considera que los funiculares de Galata y Giessbach son los primeros funiculares oficiales (que cumplen todos los requisitos para ser considerados funiculares) inaugurados en Europa. Estamos hablando de funiculares tal y como hoy en día se conocen.
A nivel histórico, el Reisszug, un sistema de vías instalado en el castillo de Hohensalzburg (Salzburg, Austria) que documenta el Cardenal Matthäus Lang en 1515, podría considerarse como el primer funicular y la primera línea férrea de la historia, aunque técnicamente, no reuniera en aquel entonces las condiciones necesarias para ser considerado un funicular al 100%. Algo parecido se instaló en 1575 en las minas del Rio Severn, en Inglaterra, sin ser considerado oficialmente un funicular.
En Estados Unidos cuentan con el ferrocarril cremallera mas alto del mundo. Es el Manitou & Pikes Peak Railway, en Colorado Springs. La línea tiene su estación superior situada a 4.302m. Con una rueda dentada que va por una vía especial montada en el medio de las vías tradicionales, funciona desde 1891.
El segundo cremallera mas elevado del planeta (y puede que el mas rentable) es del Jungfraujoch (Suiza), que recorre las entrañas del Eiger y el Mönch, por encima de Grindelwald, Kleine Scheidegg y Lauterbrunnen. La línea, cuya estación superior está situada a 3.454m, celebró en 2012 su centenario.
El tren de cremallera más empinado del mundo, con una inclinación máxima del 48% está en Suiza y es el que cubre la línea entre la orilla del Lago de los Cuatro Cantones (cerca de Luzerna) y la cumbre del monte Pilatus, a 2.120m. El recorrido es verdaderamente impresionante.
