Cualquier cosa es buena para cumplir el sueño olímpico y sufragar unos gastos que las federaciones, tanto la española como la catalana, no son capaces de cubrir al ciento por ciento. El deporte blanco español está sin blanca y los deportistas son los primeros perjudicados. Y, lo peor, el futuro también se presenta en blanco.
Después de Carolina Ruiz solo están ellas. Si ellas se van, no quedará absolutamente nade. Entonces, ¿por qué no potencian a estas niñas?, se queja Kiko Boix, pintor de profesión y padre de Mariona Boix, una prometedora esquiadora de 18 años que, junto a Núria Pau, Ona Rocamora y Laura Jardí, conforman la segunda linea del esquí femenino español.
Hace año y medio, todas ellas estaban en el equipo junior auspiciado por la Federación de Deportes de Invierno (RFEDI). Pero, desde el 2010 hasta el 2013, la federación ha visto reducidas las subvenciones públicas en más del 50% y su presupuesto no alcanza los dos millones de euros. Esa merma, junto con una discutible gestión de recursos, ha hecho que el equipo español de esquí alpino se haya quedado bajo mínimos. Solo Carolina Ruiz tiene todos los gastos cubiertos. Ferrán Terra y Paul de la Cuesta completan el equipo de élite. Por detrás, todo es desierto y desolación.
El equipo B de la RFEDI quedó desmembrado la final de la temporada pasada. Xavier Salarich y Andrea Jardí no aguantaron más y optaron por la retirada. Pol Rocamora, ya de 22 años, y Laura Jardí, hermana de Andrea, se acogieron al programa ARC (Alt Rendiment Català) del Consell Català de l'Esport y la Federació d'Esports d'Hivern (FCEH), que cubre una parte de sus gastos. Y Pol Carreras se lió la manta a la cabeza y navega por su cuenta y riesgo en busca de una plaza olímpica en la modalidad de Slálom, que ya tiene casi en la mano pese a los obstáculo que ha encontrado, algunos de ellos directamente puestos por la Federación española.
"Cuando dispones de tan pocos recursos, no se puede fallar. Y, sobre todo, cuando no se ayuda, lo mínimo que se puede hacer es no pones palos en las ruedas", exclama Ramón Carreras, tío de Pol, y presidente de la Federació Catalana desde 2006 a 2011. Afirma que la española ha llegado a impedir disputar a Pol pruebas de Gigante en la misma estación donde acababa de correr un Slálom.
Su sucesor en la catalana, Óscar Cruz, admite también los problemas de recursos a los que hacen frente. La semana pasada la asamblea aprobó un presupuesto para 2014 de 1,4 millones de euros,de los que solo 415.000 euros se pueden destinar al programa ARC y a la tecnificación, que incluye el centro de esquí alpino de Salardú (Vall d'Arán). "Si alguien saca una medalla en Sochi será un milagro. Los países europeos con tradición multiplican por 50 ó 60 nuestros presupuestos", asegura Cruz.
e la única federación que aporta esquiadores alpinos al equipo español. Solo De la Cuesta y Juan del
Campo son de fuera, del País Vasco, aunque formados casi íntegramente en Catalunya. Y la gran capitana, Carolina Ruíz, va a participar en sus cuartos Juegos Olímpicos a sus 32 años. Su relevo está, mas que nunca, en el aire.
Pol Rocamora, hermano de Ona, es uno de los esquiadores que ya está viajando por los países alpinos de Europa, en pruebas FIS y de Copa de Europa, para lograr los puntos que necesita para meterse en los Juegos. Su planteamiento es año a año, sabedor de que ahí está el pasaporte olímpico, es que
Pol Carreras de 23 años, está exprimiendo sus últimas posibilidades de ser olímpico. Expulsado literalmente del equipo español pese a ser el mejor slalomista (tres veces campeón de España y hace unos días el primer español que baja de los 20 puntos en un slálom FIS), en Octubre inició su campaña de crowfunding en el portal Gofundme con el objetivo de alcanzar los 8.000 euros. Ayer llevaba recaudados 5.300. El resto, hasta llegar a los 30.000 que cuesta aproximadamente la temporada completa, deberán salir de su bolsillo y de los apoyos logrados en el Ayuntamiento de Valldoreix y de algunas marcas como Fischer, "si no sale más dinero, cerraré el chiringuito", asegura Pol, que está a un paso de alcanzar el ranking para entrar en los Juegos de Sochi.
- Pol Carreras: gofundme.com/polcarreras
Laura Jardí de 21 años, ha incluido en su página web una pestaña en la que acepta donativos con los que completar su pequeño presupuesto. Hay recompensa para los mecenas. Por 100 euros, tendrán derecho a colgar su nombre o logotipo en la pagina; por 250 euros, una camiseta firmada.; por 500 material o esquís usados por Laura; y por mas de 1.000 compartir un día de entrenamiento o algún evento con la joven esquiadora, que se ha unido a última hora al grupo de la Federació Catalana completado por Núria Pau, Ona Rocamora, Mariona Boix y Julia Bagalló. La tres primeras han abierto una campaña en la web.
- Laura Jardí: laurajardi.com/
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