Los esquiadores que vayan a Glenshee la próxima temporada podrán disfrutar de un nuevo telesilla. La instalación promete ser toda una atracción en un país, que no instalaba un remonte de este tipo desde que The Lecht colocara un triplaza de segunda mano en 1999 procedente de Le Grand Bornand (Francia). La estación no ha especificado si en este caso el telesilla será nuevo, pero al parecer se compró el año pasado, pero los permisos de la Autoridad del Transporte no llegó, y se ha tenido que esperar a este verano para acabar su construcción.
La alegría para los aficionados escoceses llega por partida doble, ya que a la instalación del primer telesilla de este siglo, se une la confirmación de que el esquí vuelve a pasar por un buen momento en Escocia. De hecho la misma Glenshee tuvo que ser 'abandonada' por sus gestores hace unos cinco años, y siguió en marcha gracias a varios voluntarios que cada fin de semana ponían los remontes en marcha y preparaban las pistas.
El sector del esquí en Escocia se había agravado por dos razones: un largo ciclo de pocas nevadas, y la aparición de las compañías aéreas de bajo coste, que dejaban a los esquiadores británicos en el corazón de los Alpes por muy poco dinero. Por fin, hace unos tres invierno, esa mala racha se rompió, y las nevadas llegaron con fuerza. De hecho hace dos temporadas, se llegaron a registrar mas de 4,5 metros en algunos centros como Cairngorm, lo que imposibilitó por una semana el poder acceder ni siquiera al aparcamiento.
La crisis económica ha acabado de ayudar a estas estaciones, que han visto como los británicos volvían a sus pistas ante la disminución de recursos para poder volar a los Alpes. Las cinco estaciones acabaron de dar el empujón final creando un forfait conjunto. Ahora un esquiador puede pasar una semana esquiando en Escocia en distintas estaciones, que además están todas muy cerca una de las otras.
El resultado de todo esto es que llevan tres años incrementando la venta de días de esquí, e incluso alargando la temporada hasta el mes de Junio. La instalación de este telesilla por los nuevos propietarios de Glenshee (la compraron hace cuatro años) significa la consolidación del deporte de nieve en Escocia, y la apuesta de los nuevos dueños por modernizar las instalaciones, e incluso crecer su área esquiable. Glenshee abrió el año pasado el 26 de noviembre, y pese a que no tienen fechas oficiales, abrirán en cuanto tengan nieve.
El primer telesilla en Escocia de este siglo
La estación de esquí de Glenshee estrenará telesilla esta próxima temporada. Es todo un hito en el esquí de Escocia, puesto que desde 1999 que no se instalaba uno en la nación. Además consolida el buen momento que pasa este centro invernal.