El director general de Ensisa, Conrad Blanch, expuso ayer el estado de las cuentas de la sociedad en una sesión ordinaria del Comú de Canillo. En la última campaña de nieve los ingresos obtenidos ascendieron a 23,8 millones de euros, mientras que en la del 2007-2008 la cifra fue superior en 24,3 millones de euros. Dentro del capítulo de ingresos se destaca la venta de forfaits, en la que también se aprecia un descenso de una campaña a otro. Así, las entradas para pases de nieve del año pasado fueron de 14 millones de euros mientras que hace dos temporadas fue de 14,3 millones de euros.
Según señaló Blanch, al ejercicio que va desde mayo del 2008 a abril del 2009, Ensisa recortó los gastos consiguiendo así "ser más eficientes que en la temporada anterior", indicó. Los accionistas de las estaciones invirtieron el asfaltado del aparcamiento del Tarter, la construcción de un lago, la mejora de la seguridad y de las pistas y en el campo de golf
Aparte del estado de las cuentas, Blanch explicó que el acuerdo de repartir los ingresos de Grandvalira por número de forfaits de las dos sociedades todavía no es un hecho. El cónsul de Canillo, Enric Casadevall, indicó que la decisión está sujeta a las conclusiones del estudio de la consultoría, que se presentará en breve, y al hecho de si se lleva adelante un estudio más profundo para establecer qué ahorro puede suponer hacer la gestión del dominio conjuntamente.
El mandatario manifestó que SAETDE (explotadora de las estaciones del Pas de la Casa y de Grau Roig) aceptaría un reparto de acciones que otorgara más participación a Ensisa siempre y cuando se hiciera una gestión que permitiera ahorrar dinero para no perder margen y "este paso aún no está claro, porque hay que valorar la importancia del ahorro, que podría ser de hasta 3,5 millones de euros".
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