Alrededor de 130.000 turistas han visitado Ponent durante los quince días de celebración de las fiestas navideñas, según confirmó ayer el director del Patronat de Turisme de la Diputación de Lleida, Xavier Moncayo.
La mayoría de los visitantes, en un 67%, se decantan por la zona de l’Alt Pirineu para practicar deportes de invierno como el esquí, mientras que el restante 33% disfruta de la oferta turística de las comarcas de la Plana y el Prepirineo.
Moncayo calificó de satisfactorias las cifras de afluencia que han rozado el 80%, como estaba previsto, aunque “no han sido excepcionales” puesto que las estaciones de esquí nórdico han permanecido cerradas y sólo han estado abiertas para su uso turístico.
El presidente del Patronat de Turisme explicó que la buena calidad y cantidad de nieve de las pistas de Baqueira Beret y Tavascan han propiciado una ocupación más alta a pie de estas pistas, que ha rozado el 100%, así como en el resto de pistas que han abierto parcialmente como Port Ainé, Espot Esquí, Boí-Taüll y Port del Comte.
Asimismo, Moncayo señaló que la afluencia de turistas ha sido más alta en la segunda semana, del 1 al 9 de enero. Las cifras son similares a las registradas el año pasado, según explicó el presidente del Patronat de Turisme, excepto en el Aran donde la afluencia de visitantes ha sido más alta debido a una mayor cantidad de nieve.
La tónica general de descenso de la ocupación hotelera respecto al 2004 también se ha notado en el Pallars Sobirà y en l’Alta Ribagorça.
La cifra más alta de ocupación, sin llegar al 100% en ambas comarcas, se registró durante el pasado fin de semana, coincidiendo con Fin de Año. Los hoteleros, como el Patronat de Turisme, justifican el descenso de ocupación por la escasez de nieve que este año padecen las estaciones.
Port Ainé acogió ayer 2.000 esquiadores, mientras que 600 pasaron por Espot Esquí. Por esta estación durante todas las fiestas navideñas han pasado unos 7.500 esquiadores. En el caso de l’Alta Ribagorça, algunos esquiadores se han acercado a Baqueira para esquiar.
La falta de precipitaciones de nieve y las altas temperaturas de día han favorecido el turismo de paseo y las visitas al conjunto románico de la Vall de Boí y al Parc Nacional d’Aigüestortes. A la escasez de nieve hay que añadir la falta de puentes festivos que han concentrado la mayor parte de visitantes los fines de semana.
La ocupación registrada también coincide con las cifras barajadas por el presidente de la Federació d’Hostaleria de Lleida, Juan Antonio Serrano. “El porcentaje de ocupación ha sido menor pero ha durado más días”, recalcó Serrano, por lo que los beneficios serán mayores, según el presidente de la federación de hostelería. Las cifras exactas de la ocupación y las pernoctaciones se conocerán a partir de esta semana, según señalaron Moncayo y Serrano.
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