La ocupación en el Pirineo rozó el lleno al comienzo del puente y se redujo al 60% del domingo al lunes. No obstante, las nevadas han dejado las pistas en perfectas condiciones y los espesores registrados, los mejores de los últimos cinco años, auguran unas excelentes expectativas para las próximas navidades.
"El balance es positivo; aunque el miércoles y el jueves a causa de la incertidumbre por el el mal tiempo se anularon algunas reservas, los alojamientos se han terminado llenando, y la gente ha podido disfrutar en las estaciones", apuntó el propietario del hotel Villa de Canfranc de Canfranc-Estación, Francisco Coduras.
A la misma conclusión llegaron el director de Cerler, Joaquín Alsina, y el de Astún, José Manuel Pantoja, aunque éste lamentó que el aparcamiento se quede pequeño. Por lo que se refiere al Valle de Tena, la estación de Panticosa ha incrementado un 34% el número de clientes en comparación con las mismas fechas de la pasada temporada, según explicó su director comercial, Roberto Morales. Desde Formigal su director José María Abós subrayó que finalmente se había podido poner en funcionamiento casi todos los remontes y dominios esquiables, a excepción de las pistas negras, "que aún así se han esquiado".
Respecto a la provincia de Teruel (...) el gélido panorama no se tradujo, sin embargo, en grandes nevadas en las dos pistas de esquí de la provincia. Unas mil personas pasaron por sus instalaciones desde el pasado sábado. El gerente de Nieve de Teruel, Salvador Galve, reconoció que las pistas han contado con poca nieve, aunque consideró que la entrada de los tres primeros días de temporada había sido buena.
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