Una apuesta de gran altura

Una apuesta de gran altura
Más de 4.100 personas han alcanzado los 8.848 metros del monte Everest desde el ascenso de Edmund Hillary y Tenzing Norgay en 1953. De ellas, sólo en 7 ocasiones lo han logrado por el corredor Horbein, en la cara norte del Techo del mundo.
Más de 4.100 personas han alcanzado los 8.848 metros del monte Everest desde el ascenso de Edmund Hillary y Tenzing Norgay en 1953. De ellas, sólo en 7 ocasiones lo han logrado por el corredor Horbein, en la cara norte del Techo del mundo.

Ése es el reto. Una apuesta alpinística de primer orden. Y el pamplonés Mikel Zabalza Azcona parte hacia allí mañana. Quiere repetir la gesta que, en 1986, firmaron Erhard Loretan y Jean Troillet al ascender esta complicada ruta de más de 3.000 metros de roca, nieve y hielo que, en algunos momentos, alcanza inclinaciones superiores a 70 grados.

Y busca hacerlo, además, con el estilo que usó la cordada suiza: sin oxígeno suplementario y en estilo alpino -es decir cargando ellos mismos con todo el equipo, sin sherpas y sin campos fijos de altura-.

Zabalza viajará junto al alavés Juan Vallejo y el guipuzcoano Alberto Iñurrategi, con quienes ya compartió la cima del Gasherbrum IV y el intento al Pilar Oeste del Makalu.

Ellos dos ya saben bien qué van a encontrarse. Subieron en 2006 hasta los 8.450 metros, pero tuvieron que desistir sin la cima. "Apenas he mirado libros ni fotos. ¿Qué mejor documentación y referencias que la que pueden darme ellos? Han estado allí y saben bien de lo que hablan", explica sonriente Zabalza, quien, aunque consciente "de que va a resultar muy difícil", se muestra optimista. "Lo que me han transmitido Juan y Alberto es que se trata de una vía muy atractiva, muy directa a la cima, complicada pero que se puede, que hay bastantes posibilidades de subir. Por eso vamos. Desde luego si fuera descabellado no iríamos", dice el navarro.


Ruta del Corredor Hornbein
Ruta del Corredor Hornbein

La gran duda del trío -que aclimatará en la ruta normal de la cara norte y preve alcanzar la cumbre a primeros de octubre- es la ruta de descenso caso de llegar a la cima. "Volver por el mismo recorrido tiene el beneficio de que el último día podemos salir con lo puesto, dejando el material para recogerlo a la vuelta. Lo malo es que son laderas con mucha inclinación, muy expuestas y donde cualquier error es fatal", apuntaba, antes de añadir: "La otra opción es bajar por la normal de la cara norte pero, eso, nos obligaría a subir hasta la cima con todo el material y las tiendas para dormir en el descenso".

Es el peaje por hacer un intento en estilo alpino. "Es una ruta idónea para hacerla en ese estilo, aunque lógicamente tienes menos opciones que yendo por una ruta normal. Tratar de fijar cuerda aquí sería un trabajo enorme y, además, no me motiva tener que subir y bajar 80 veces por la misma cuesta para colocar cuerdas", reconocía Zabalza, quien tiene claro lo que le aporta la montaña. "No soy muy místico con ese tema. A mí, la montaña y la naturaleza me gustan desde crío. Necesito ir cada poco tiempo. Me hace sentirme bien, es una válvula de escape y allí, disfrutando de una escalada o de la compañía, soy feliz. Tan sencillo como eso".

Fuente: Diario de Navarra

0 Comentarios Escribe tu comentario


    Escribe tu comentario





     

    Si este mensaje tiene un solo insulto, no te molestes en enviarlo, porque será eliminado.
    AVISO: La IP de los usuarios queda registrada

    Los comentarios aquí publicados no reflejan de ningún modo la opinión de Nivalis. Esta web se reserva el derecho a eliminar los mensajes que no considere apropiados para este contenido. AVISO: La IP de los usuarios queda registrada, cualquier comentario ofensivo será eliminado sin previo aviso.



    Lo más leído: