Muy intenso. Tanto que en sólo cinco días se ha ido la mayor parte de la nieve caída, especialmente en cotas inferiores a 2.800 / 3.000 metros, según la orientación que tenga la ladera. Ya es difícil disfrutar de la nieve, pero no imposible, al menos en Sierra Nevada y por algunos días más. Eso si, las aproximaciones andando serán cada día más largas y el foqueo por medias laderas más complicado: pendientes mas pronunciadas para buscar altura, y nieve muy dura o muy blanda, casi sin termino medio. Pero el descenso esquiando bien vale la pena si madrugas.
Una de las mejores bajadas primaverales es sin duda la del Elorrieta (3.187m), entre los Tajos de la Virgen y el Cartujo. La pala por la que se desciende es muy vertical y continua. Más de 300 metros de pura adrenalina. Realmente los últimos cien metros de subida son una diagonal que va bordeando la cumbre, por lo que no son tan interesantes si sólo vas buscando la bajada esquiando. Te los puedes ahorrar, pero si llegas a la cima las vistas del mar, la Alpujarra y el valle de Lanjarón son espectaculares.
Esta excursión se hizo el jueves 21 de Mayo. Desde la Hoya de la Mora y hasta Borreguiles tocó patear, algo que ya estaba previsto, por lo que fuimos directamente en zapatillas de deporte. A partir de ahí, esquís puestos. La nieve es continua, está durita y se progresa rápidamente.
Carretera Hoya de la Mora - Borreguiles
Telesilla Veleta
A partir de aquí, esquís puestos
Se nota las zonas donde los cañones trabajaron en invierno
El calor obliga a ir ligeritos de ropa
De momento el manto es continuo
A partir del collado de entrada a la zona de La Laguna, falta nieve. Hay que quitarse los esquís y andar un ratillo hasta la misma Laguna de las Yeguas. El agua corre por todos los rincones, hay que ir saltando arroyos, y con mucho cuidado de no pisar zonas de nieve hueca, esos tunelillos que se forman discurrir el agua del deshielo por debajo.
Al acercarnos a los Tajos comienza el verdadero ascenso. Es una diagonal muy larga y constante, tan sólo hay que hacer unas zetas en el tramo final, pero es una subida muy técnica. La nieve en unas zonas está muy dura, dificultando la toma de cantos, y en otras muy blanda, sin consistencia, y no hay una buena huella que seguir.
Collado de la Laguna, al fondo el Elorrieta y la pala que esquiaremos
Toca hacer el cabra un rato
La primavera en la Sierra es un espectáculo
Puntos de hidratación no faltan
Los Lagunillos comienza a asomar
Ojo con las zonas huecas bajo la nieve
Punto en el que comienza la subida de verdad
Una cuestión a tener en cuenta estos días de tanto calor es que las pieles de foca se empapan con facilidad, y cuando esto ocurre, se despegan, haciendo del ascenso un infierno. Mejor no empeñarse en seguir. Lo suyo es quitarse los esquís y acabar andando con crampones y piolet. Y si no los llevas, media vuelta y a esquiar.
En nuestro caso, tuvimos este problema llegando a la zona donde comienza el descenso, y decidimos no seguir subiendo. Esta vez era mejor sacrificar las vistas desde la cima y tener mejor nieve a la bajada, que el calor estaba apretando y mucho.
Tajos de la Virgen
Vistas del Veleta
Problemillas con las pieles
Zonas de fuerte pendiente y nieve dura
Disfrutando las vistas antes de comenzar la esquiada
¡Vaya pinta tiene la primera pala!
La nieve al bajar es pura crema
El segundo tramo es mucho más pronunciado
Aquí toca moverse bien y hacer un giro muy corto
La nieve se nota algo más húmeda al perder altura
Apurando el descenso todo lo posible
La bajada esquiando es alucinante, tanto que te vienes arriba y sigues y sigues, prolongándola tanto como la nieve lo permite. Luego esto supone un problemilla ... que hay que volver a remontar. En nuestro caso lo hicimos por la Cuesta Artesillas. Al llegar a Borreguiles, otra buena bajada esquiando, aunque ya mucho más tranquila.
Posiblemente con esta ruta y esquiada finalicemos la temporada 19/20, así que ... ¡buen verano a todos!