Llegó la nieve...y yo con estos pelos!

Llegó la nieve...y yo con estos pelos!
Aunque el mentado cambio climático realmente esté haciendo de las suyas (por las nuestras...) y los cambios de estación otoño- primavera estén desapareciendo, la verdad es que sigue nevando y con ello vuelve nuestro deporte favorito. Pero no olvidemos que el esquí es un deporte y como tal necesita de cierta preparación y acondicionamiento, tanto para evitar lesiones como para practicarlo con total satisfacción.
Aunque el mentado cambio climático realmente esté haciendo de las suyas (por las nuestras...) y los cambios de estación otoño- primavera estén desapareciendo, la verdad es que sigue nevando y con ello vuelve nuestro deporte favorito. Pero no olvidemos que el esquí es un deporte y como tal necesita de cierta preparación y acondicionamiento, tanto para evitar lesiones como para practicarlo con total satisfacción.

Desde aquí no nos cansaremos en repetir que el esquí, como todas las actividades de montaña y en definitiva, como todos los deportes, no son solo actividades sociales sino que también es una actividad física.

Deberemos por tanto, ya seamos más o menos fanáticos, ir preparándonos para lo que nos viene encima: necesidad de cierta condición física, control coordinativo, conocimiento de la técnica... todo ello en un lugar en el que a menudo hace mal tiempo y frío e incluso nieva. En definitiva, mejor será llegar preparados.

En cualquier actividad física y deportiva existe un concepto común que nos puede ayudar para el fin que buscamos, en este caso esquiar, sin ser en definitiva exactamente la actividad propia: a esto, así, en general, lo conocemos como transferencias.



Para hacernos una idea, el deportista de windsurf encuentra una transferencia perfecta para su actividad cuando, a su manera, practica en un gimnasio el ejercicio de polea tras nuca: puede imaginar que está tirando de la botavara con fuerza 3. De cualquier manera se tratará de hacer ejercicios y movimientos, incluso deportes completos, que al final nos ayuden a disfrutar como ni imaginamos de aquel que tanto nos gusta, en este caso, el esquí alpino.

Veamos a continuación la variedad de cosas que podemos hacer para que, cuando llegue la temporada, con el equipo preparado y las ganas que nos desbordan, podamos pasarlo de bien y sobre todo, tengamos un buen seguro antiroturas. Aunque las actividades que describimos son totalmente asequibles para cualquiera que se lo plantee, inicialmente es casi imprescindible acercarnos a ellas de manera saludable, deportiva y con las miras abiertas: esto es, sin fumar ni beber alcohol en exceso, buscando lo mejor para nuestro organismo a través del ejercicio físico y con ganas de probar cosas que quizás ni conocíamos. Vamos allá.

  • Andar, correr, saltar, tanto por el campo como por cualquier otro sitio, nos ayudará a estar en forma para soportar la práctica del esquí y, además, nos hará sentir mejor. Si no hacemos nada, por algo deberemos empezar.
    Al esquí hay que llegar con cierta forma física puesto que para hacer deporte con esta actividad hay que esquiar a ritmo de corredor, es decir, muchas bajadas en nieves normalmente duras y recuperando en cada subida de silla, y eso la verdad, no lo hace casi nadie. Podremos en cambio, al correr, y para imitar los movimientos que luego tendremos esquiando, bajar en zig-zag entre arboles y con bastones, hacer cada cambio de dirección apoyándonos siempre en la pierna exterior al movimiento de cambio, saltar entre badenes...



  • El gimnasio, con todas las posibilidades que brinda es una de las mejores alternativas, el problema es que hay que ir y si nos pasamos de cargas seremos como ladrillos sobre algo que desliza. Hacer un acondicionamiento progresivo y asesorado nos dará, probablemente, los mejores resultados.



  • Ejercicios como el aerobic, el pilates, o el yoga, nos pueden ayudar como pocos porque son fáciles y de bajo impacto. Recordad que la forma física no se coge esquiando: ya se llega con ella. Caminar no es malo y por algo deberemos comenzar, sobre todo aquellos que piensen que el esquí ya es suficiente deporte.

  • Patinar, tanto en línea como en cuatro ruedas clásico, o mejor aún, en hielo, es indudablemente de lo mejor que podemos hacer: hay una relación directa entre la posición que debemos adoptar y su transferencia en el esquí alpino. Si realmente queremos aprovecharlo para el fin último del esquí, podremos practicarlo con bastones y cuesta abajo, pero atención, siempre vigilados y en lugares muy controlados.



  • Cuando se está muy, muy fuerte (física y mentalmente hablando) e incluso tenemos un control técnico excepcional, actividades como la escalada, la BTT, el rafting, el descenso de cañones, el piragüismo en aguas bravas... serán actividades con una gran transferencia para el esquí alpino pero también, con un altísimo grado de exigencia, así como de riesgo de lesiones, y la seguridad siempre es lo primero. Trabajaremos el equilibrio, la adaptación, el ritmo, la capacidad física... Deberemos ser conscientes de nuestras posibilidades y entrenar sin ponernos en riesgo.



  • Para técnicos o aspirantes a ello, deportistas de nivel y profesionales en general, siempre quedará la posibilidad de practicar esquí alpino sin nieve: esquí en graveras y arena (no pasa nada y desliza, pero atención con las caídas), descensos en pistas sintéticas y de nieve artificial ( la pista madrileña de Xanadú es muy recomendable para hacer ejercicios, no para hacerse unas bajadas...), rollesquí alpino de asfalto...



  • Pero si de verdad tenemos muchas, muchas, muchas ganas, lo mejor será irnos a catar las nieves eternas que aún quedan, incluso con medios mecánicos, y darnos un homenaje de los de antes, no vaya a ser que no nieve.... y aquí es donde aparecen el mayor número de lesionados en pretemporada.

    En Europa existen al menos 10 glaciares equipados, perfectos para ir preparando lo que luego será la temporada de verdad, pero si lo hacemos sin cabeza y con muchas ganas, el invento nos puede salir al revés.
Parte alta del glaciar Rettenbach, en Solden


Si después de todo, al final nevará, probablemente más de lo que imaginábamos, y esto siempre lo hacemos para disfrutar, así que preparémonos con prudencia que las mejores bajadas de nuestra vida aún está por llegar.

Pues eso, a seguir disfrutando!!!

Saludos



Luis Anias

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2 Comentarios Escribe tu comentario

  • #1
    Fecha comentario:
    21/11/2006 09:13
    #1
    Mmm, aquí en Logroño estamos esperando a que nos inaguren la pista de hielo en abril para poder hacer un ejercicio perfecto para coger la forma.. y pasar menos calorcito en verano jeje.

    Buen reportaje y, sobre todo, realista.

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  • #2
    Fecha comentario:
    22/11/2006 10:34
    #2
    Buen repor

    karma del mensaje: 0 - Votos positivos: 0 - Votos negativos: 0


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