La vetusta estación de Pajares siempre es especial para mí, aunque mis primeros pasos en la nieve fueron lejos de las estaciones, si tengo que decir que mi comienzo en pistas fue aquí.
Han pasado años y aunque la estación no ha evolucionado como me hubiera gustado, sigue conservando ese encanto que la hace especial.
La temporada comenzó tarde, las medidas de apertura de las estaciones se hicieron esperar, pero al final llegaron y desde el día 4 se podía esquiar en las estaciones asturianas.
Fuentes se encuentra cerrada ya que el acceso desde Asturias no es posible por los aludes y desde León no permitido por los cierres perimetrales, así que la opción que queda es irse a Brañillin para disfrutar de esta fantastica nieve que nos encontramos en estos días, después de unas nevadas de record.
Para acceder a la estación de Valgrande, es necesario cruzar territorio leonés, lo cual no incumple las diferentes normativas de restricción de la movilidad ya que se realiza en tránsito hacia territorio asturiano.
Al no poder la gente de Asturias repartirse por las diferentes estaciones de la Cordillera se suponía que iba a haber gente, así que tocaba reservar el forfait por internet y así evitar la cola que se iba a formar en la taquilla, sin asegurar que se pudiera adquirir el pase al haber una limitación de aforo de 1.200 personas.
A primera hora ya estaba el parking practicamente lleno, mostrando las ganas que tenía la gente de poder esquiar, mas en un día de buen tiempo como el que se presentaba, temperaturas de -8ºC, ausencia de viento y un sol radiante, con un montón de nieve polvo para disfrutar.
Vamos a repasar con imagenes la situación en el día de ayer, 7 de enero, un regalo despues de los Reyes Magos.
Llegando a la estación, carretera prácticamente limpia, aunque recomendable las ruedas de invierno o mixtas para la parte final del acceso desde la carretera nacional hasta Brañillin
El sol empezaba a brillar sin la presencia de nubes
Antes de que se formaran colas en el telesilla Brañillín habia que disfrutar de unas rápidas bajas, recorriendo los 390 m de desnivel
Hacia el Valle del Sol
Se podía ir tanto por la pista como hacer breves salidas para disfrutar de esa nieve polvo sin transformar
Tocaba ver la zona del Tubo y abajo Les Patines, así como se encuentra media Asturias
La parte del Tubo estaba sin pisar, se podía bajar porque la nieve se encontraba suelta, lo malo que el teleski estaba cerrado
Llegando al Cueto Negro
Siempre merece la pena acercarse a ver las Tres Marías desde lo alto de la estación, esta zona es una pena no poder disfrutarla pero ya se encuentra en terreno leonés existiendo esa limitación
Zona alta de la estación, lugar donde se produce más concentración de gente, ya que llegan 3 remontes de los 4 que estaban en funcionamiento, no obstante en las pistas no había mucha gente, formandose la cola al concentrar a los esquiadores sólo en las sillas. 
El sol lucía a media mañana, esta zona ofrece unos excelentes itinerarios que permiten bajar hasta el pueblo de Casares de Arbás.
Vistas a las Tres Marías y el bosque de Arbás, zona de Gistredo
Volviendo a las pistas se podía ver los efectos de esta nevada, al fondo Celleros y más cercano la llegada de la percha de Fuente la Reina que da acceso al Vallón. Desafortunadamente lel teleski estaba cerrado
Los cañones estuvieron funcionando, hay que asegurar la temporada y viendo que la situación era optima había que aprovechar. Bajando por el Tubo que se encontraba sin pisar
Parte final del Tubo, donde había que irse a refugiarse a la zona de les patines ya que empezaba a haber atasco en las otras sillas
Antes había que probar como se encontraba la nieve por la Cornisa y el Robezu
Mirando hacia el valle del Huerna, con las Ubiñas al fondo
Aún quedaban zonas donde abrir huella
También se podia disfrutar de alguna salida por la sombría zona de Peligrao
El Tubo y el Muru desde la silla
Bajando por el Muro del Valle del Sol
El Valle del Sol, tubo una pista reservada hasta las 14:00 horas para que los clubes pudieran entrenar
Cola que se montaba en la silla, por suerte pude evitarla. Quizás este fue el punto debil del día, los atascos que se montaron en esta zona, por tal motivo prefería bajar hasta abajo y tomar la silla lenta
Celleros, uno de mis lugares favoritos donde disfrutar con las pieles de todas las posibilidades que ofrece esta zona por sus diferentes vertientes, espero que no se olviden de ella si se va a mejorar la estación
Bajando por el enlace del arroyo
Parte baja de la estación, con el Cellón al fondo, un lugar recomendable para subir con el equipo de travesía, el mayor problema es que el aparcamiento cae en la zona de León y no puedo disfrutarlo
Disfrutando por zonas que no suelo disfrutar por falta de nieve
Al marchar, se puede ver la zona que se dejó morir de la estación, tres remontes que ofrecían muchas posibilidades, La Picarota, Abedules y Dulce la Dueña.
