Si el día anterior acabó con fotos como la última, el jueves 11, tras ser zarandeado, sacudido, y traqueteado durante toda la noche dentro de mi autocaravana por los catabáticos, ya me suponía que lo que iba a ver sería esto:
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Con la carretera así:
y así:
no me apetecía mover la auto, de modo que me bajé a Sextas a pata, donde el panorama a las 9 de la mañana era ciertamente desolador por un lado...
...e inquietante por el otro...
No es niebla, es nieve arrastrada por ráfagas de viento realmente fuertes.
Para los que vamos de bocata , hoy esto era el lugar ideal, desde luego, para dar fé del trato un poco paria que recibimos. La papelera tenía patas.
¿Ande vas, alma de cántaro, con lo malo que hace?. Es un militar de unos cuantos que no se esperaban los unos a los otros. Si hay que subir, se sube, una orden es una orden, no creo que estuvieran por gusto.
Ante la perspectiva, paseo al canto por la urba, buscando entre otras cosas una wifi abierta, que tenía que enviar el final de un curro que me llevé. Estampas curiosas:
Para sacarse para el FF, está muy bien. Puede ampliar la oferta poniedo cadenas a los que no saben...
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¡Cachis!, casi hago una foto con 0 como valor absoluto: -12º a las 12...y cuarto.
El club de Los Zarandeados. La mía es la del centro y la siguiente es la de un personaje que motejé como "ruidoso". No se puede poner un generador eléctrico de gasolina sin insonorizar a las 10 de la noche en el exterior, bajo los hoteles y al lado de compañeros autocaravanistas, porque tú te hayas quedado sin batería. Coges y te vas a armar ruido a otro lado, pero bueno, al final el que se fue fui yo, no tenía ganas de hablar con sujetos poco empáticos. La mayoría de los compañeros no somos así. El primero es "misterioso", no apareció por allí en dos días. Me empecé a preocupar...
Por la tarde el viento calmó un poco, y decidí salir a estirar las piernas por la carretera vieja de Sallent, con intención de llegar al embalse.
En un estado así no es bueno aventurarse con el coche y más si no llevas cadenas puestas, por que te puede pasar esto:
Se salió y se subió en un tocho de nieve con lo cual las ruedas no estaban en contacto con el suelo. Ahí se quedo por la noche.
No logré llegar al embalse, se echaba la noche encima, el viento volvía a arreciar y me dejé la frontal. Así estaba el camino.
Al día siguiente, viernes 12 de febreo, a las 9 de la mañana, la estación presentaba 21 km abiertos y una pinta fea, de manera que tras el pertinente chocolate en Sextas, decido marcharme a Panticosa, estación que no conocía y que en este momento tenía más km. abiertos y mucho mejor tiempo. Tras calentar un poco en las pistas de Petrosos, paso a Sabocos, donde FLIPO con el paisaje:
Curiosa la silla de Sabocos, que en el desembarque no da a ninguna pista, sólo puedes tomar otro remonte o un bocata, a elegir.
Vuelvo a insistir en que me pareció espectacular. Abajo, el Ibón de Sabocos...
...y arriba el de Asnos.
¡Mmmm, qué de gente en pistas!
Desde el Mirador de los Valles, Búbal,
Sallent y Lanuza,
Midi, y la boina que se quedó atascada encima de Portalet cuando se marcharon los catabáticos, ahora que ya me había ido yo.
Una panorámica más general.
Hora de comer frente al Ibón de Asnos, las tablas de snow también sirven para esto, si les das la vuelta. ¿En qué restaurante tengo estas vistas, esta tranquilidad, y este sol?
El que suscribe, tras, posiblemente el mejor día de los 4 pasados.
Sólo pongo un pero a Panticosa: sillas desesperantemente lentas. Para hilar una bajada decente (larga, entretenida) no encontré otra que lo que va desde el Mirador hasta lo más abajo posible sin cojer la cabina. Tenía que hilar 3 sillas: Fobas, Sabocos y Javier Escartin, que dan un total de media hora de reloj, sin colas. Ya sé que puedo bajar por el Bosque hasta la cabina, pero no estaba "oficialmente" abierta. El pro es las vistas tan espectaculares, y especialmente la belleza del coqueto valle de Sabocos.
PD.: ya volviendo decidí parar por fin en el momento "atardecer subiendo Monrepós" para sacar esta vista que nos saluda y nos despide cada vez que vamos o volvemos...
...razón y motivo suficiente para los que padecemos una paranoia aún no descrita en los libros de psiquiatría: la pasión por la montaña y si es nevada, mejor.
