El bastón es el elemento encargado del equipo de esquí que nos ayuda a aligerar pesos, marcar giros, etc. Las creencias de que solo sirven para impulsarnos en los remontes debería de desterrarse, pues cierto es que resultan útiles para esto, no ha de ser su único uso.
En algunos casos de Carving extremo, o bien cuando se usan los Skiboard –nombre correcto-, o Snowblades –modelo de Salomon-. Los bastones pueden quedar en segundo plano, pues no son necesarios, en Carving extremo resulta complicado colocar el bastón en cada curva, especialmente a cierta velocidad, por lo cual se convierte en un estrobo, mientras trazamos las curvas encadenadas, de manera conducida, una tras otra. El caso de los Skiboard tampoco requiere el uso de bastones. Por el contrario para los nuevos modelos denominados Wedze si que se recomienda el uso de palos.
Un bastón se compone de diversos elementos: Tubo, empuñadura, arandela, punta, y dragonera, o correa.
El Tubo puede ser de aluminio 5086, el más económico, que se destina a gamas bajas, es más rígido, y menos resistente a la flexión Hay bastones de este tipo desde los 10-12€. Para las gamas medias se usa el aluminio 5083, algo más resistente Los precios de bastones realizados con estos materiales ronda los 20€. La serie de aluminio 7000 resulta más ligera, y resistente que las anteriores, es un material muy equilibrado, su coste parte de los 30€, en adelante. Existen bastones de Carbono, más ligeros, con tubos más delgados, y con mejor resistencia que los anteriores, la pega será su precio, pues hay bastones de este tipo a partir de 40€ en adelante. El material más flexible, y resistente resulta ser el composite, son más ligeros que el resto, y tienen una vida útil mayor, aunque su precio es de los más elevados, en torno a 50€, tienen la particularidad de que pueden flexarse como un arco, y absorben mejor las vibraciones, aunque producen menor impulso a la hora de acelerar que unos de aluminio. Algunas marcas toman el composite como el material del futuro, ese es el ejemplo de Goode, que además fabrica sus esquís con fibra de carbono como núcleo.
Bastón de Aluminio
Bastón de carbono
Bastón de composite
La empuñadura puede ser rígida, de Pvc, o tipo Soft, blanda. La empuñadura de Pvc se utiliza para modelos de gama baja, principalmente. Las empuñaduras Soft absorben mejor las vibraciones que se producen al clavar el bastón, y evitan que el bastón resbale. En competición se utilizan protecciones para evitar daños al pasar por las puertas de Slalom, por ejemplo.
Empuñadura de Bastón
Hay diferentes tipos de arandela, básicamente se pueden agrupar en tres: racing, polivalente, y Freeride. Las arandelas racing son las más pequeñas, diseñadas para esquiar en pistas pisadas, y al tener un diámetro tan pequeño agilizan la maniobra de clavado del bastón. La arandela Freeride se utiliza para nieves blandas, o fuera pistas, al tener mayor diámetro se hunden menos en la nieve, además dan mayor estabilidad. Por último la arandela polivalente está a medio camino de ambas, y sirve para todas las condiciones.
Arandela de un bastón.
El punto al que menos atención prestamos a la hora de comprar un par de bastones es la punta. La punta se suele realizar en acero templado, por lo general. Hay bastones, como por ejemplo, las gamas altas de Leki, que vienen preparadas para un clavado en nieves duras, por lo cual tienen la punta fresada, y de un material más duro, que no conviene asentar en el asfalto mientras caminamos por los parking. Los bastones generalistas tienen las puntas más bien planas para que sea más fácil el clavado, y no tengan tendencia a engancharse.
Punta de bastón
La correa, o dragonera, es el elemento de seguridad que une el bastón al esquiador de manera inseparable. Hay que tener cuidado en colocar bien la correa en nuestra mano, pues puede producir la lesión que los traumatólogos denominan pulgar del esquiador, que se produce en la caída, cuando el pulgar queda aprisionado, y la fuerza del bastón desplaza dicho dedo de su sitio. La correa quedará por debajo de nuestra mano para que en caso de caída el bastón quede suelto, evitando así el riesgo de lesión. Leki utiliza un sistema que se acopla a cualquier guante, y permite desenganchar el bastón presionando un botón. Este sistema también se puede acoplar a los guantes de la propia marca, en cuyo caso no es necesario utilizar correa.
Dragonera de un bastón.
La medida se obtiene mediante dos métodos, bien multiplicando la altura del esquiador por 0,72 (ejemplo 180cm x 0,72= 129,6cm aprox. 130cm). Por otro lado está la norma conocida por todos, que consiste en agarrar el bastón por debajo de la arandela, con la empuñadura mirando al suelo, y que el esquiador forme un ángulo de +/-90º entre su brazo, y su antebrazo, o bien el antebrazo quede paralelo al suelo. Hay que dar la vuelta al bastón para realizar esta última medición, pues la arandela se hundirá en la nieve. Un bastón más corto hará que nos agachemos más, en lugar de esquiar más flexionados, que es lo que todos creemos. Los bastones demasiado largos pueden incomodar los movimientos, aunque provocan mayor impulso.
Tras este artículo deberemos de pensar en nuestro presupuesto a la hora de comprar unos bastones, y de las características que necesitamos. En el mercado existen multitud de marcas, y modelos, para que todos podamos elegir de acuerdo a nuestras preferencias. En tiendas especializadas en esquí, o en Montaña, podemos encontrar repuestos de arandelas, puntas, etc.