Estamos en pleno debate del tema a raíz de la última canción de Shakira. Que si cambiar un Rolex por un Casio, que un Twingo, que un Ferrari. El tema ha levantado ampollas, pero en el caso de los esquiadores, parece que la cosa de cambiar un Rolex por un Casio no está tan clara y nos quedamos con el Rolex. La razón es muy sencilla. Rolex siempre ha estado de lado de los esquiadores. Por contra, Casio apuesta por el snowboard.
Si revisamos un poco la historia de Rolex, nos podemos remontar a los años 60... En esa época, el mismísimo Stein Eriksen ya iba con Rolex.

Anuncio de un modelo Explorer en el que aparece Eriksen
Un poco más tarde sería Jean-Claude Killy el que fuera imagen de la marca suiza, llegando a existir un modelo específico, el Oyster Dato-Compax, conocido como el "Killy", que es muy raro de ver.

Anuncio de un Explorer II con Killy

El raro Oyster Dato-Compax, con cronógrafo y triple calendario
Más adelante, tenemos a otro de los grandes, Hermann Maier, que también fue imagen de la marca de Ginebra:

Maier anunciando un Turn-O-Graph
Y en los últimos años, tres incorporaciones de lujo, se han sumado a la exclusiva lista de esquiadores Rolex. El primero, Carlo Janka:

Janka y su GMT
De la misma época es una de las mayores embajadoras que ha tenido Rolex: Lindsey Vonn. Ha lucido diversos modelos a lo largo de su carrera, desde el Datejust hasta un Daytona:


Y para acabar, otra estrella del Circo Blanco, Lara Gut, a quién también puedes ver con un Rolex en la muñeca:

Lara Gut-Behrami con un Daytona
En cambio, por parte de Casio tenemos a... Louie Vito, que también es muy bueno, pero es snowboarder.

Hombre, para los que esquiamos, no hay color. Aunque hay que decir que, para esquiar, algunos de los modelos de Casio te darán muchas más funcionalidades que un Rolex. Y hay uno en concreto, que es una auténtica maravilla, aunque cuesta lo que vale. Es el MRG-B-5000.