Una de las cosas buenas que tiene esquiar en la Cerdanya es, además de que siempre hace sol (a veces echamos un poco en falta una buena nevada mientras esquiamos), lo cerca que la tenemos. Y como la oferta es brutal, podemos esquiar a todas horas.
Un ejemplo, este fin de semana teníamos partido de fútbol escolar el sábado, que acababa a las 14h. Pues bien, tras comer tranquilamente, nos pusimos rumbo a la Cerdanya y a las 19h estábamos esquiando.
La opción nocturna de Masella es la guinda a una oferta de esquí espectacular en la zona, que permite que puedas combinar múltiples actividades o eventos familiares y no dejar de esquiar el fin de semana.
Mucha gente, cuando les explico que hemos ido a esquiar de noche me pregunta qué tal. Yo a todos les digo lo mismo. Si no lo has probado nunca te recomiendo que lo hagas porque seguro que la experiencia te gusta. Son pocas horas, hace frío, quizás estás en el sofá a esas horas,... Aunque haya varios elementos que te inviten a no probar, simplemente hazlo un día y seguramente cambiarás de opinión.
¿Por qué?
En primer lugar, es distinto. Esquiar bajo los focos es una sensación parecida pero diferente. Nada te distrae, toda la atención está puesta en la pista.

Por 20 euros puedes esquiar 3h. Creo que no hay una oferta igual en el Pirineo, y si tienes el ff de temporada de Masella, ¡12 euros!
Las tres horas que estaba abierto el sábado dan para mucho. Hay mucha menos gente esquiando que por la mañana, las pista están acabadas de pisar y se puede difrutar a tope con unos buenos esquís bajando deprisa.



De verdad, aunque a las 6 de la tarde estés en el sofá la mar de bien, coge un día y pruébalo. Tenemos aquí al lado la mayor oferta nocturna de los Pirineos y hay que aprovecharla.

¡Quedan sólo esta semana y la que viene para aprovechar!

Y no sólo se acaba el esquí nocturno... También estamos en los últimos días para completar la encuesta Nevasport. ¿Ya la has hecho?