Cada persona tiene su esquí perfecto en función de cómo esquía y de dónde lo hace. Hace años que tengo en el armario tres tipos de esquís: un SL, un GS y un all mountain (algún día añadiré alguno más porque hay cosas para pista por ahí, fuera de los clásicos GS y SL que están muy bien). Los dos primeros no han variado demasiado y mantienen las mismas formas aunque pase el tiempo. Pero el all mountain si que ha sufrido una enorme transformación y sería el prototipo de esquí casi perfecto, que se desenvuelve más o menos bien en todas las condiciones.
Hay que decir que hace años no había esquís all mountain como los conocemos ahora. Lo equivalente estaba incluído en la gama de freeride y hoy haría sonreir a un veinteañero, porque cualquier esquí de pista actual puede tener esas cotas, pero es lo que llevábamos hace 20 años como herramientas para esquiar fuera de las pistas pisadas.
Los primeros que tuve de esta línea fueron unos Dynastar Vertical 4x4, que fueron mis primeros carving y mis primeros Dynastar. Medían 195 cm y el patín diría que no llegaba a 70. Me gustaron tanto que desde entonces he sido bastante fiel tanto a la marca como a este tipo de esquí. Les siguieron unos Dynastar Intuitiv 71 Powetrack (denominación que ya tenían unos 4x4), un gran esquí pero no estaba tan en forma como ahora y para mi gusto eran demasiado potentes para esquiar fuera pista. Es un esquí que si lo miras, tiene cotas de esquí parecidas a las de un gigante de tienda actual. Este no fue mi esquí perfecto.

Más tarde, hará unos seis años, llegaron los Dynastar Legend y tuve (y tengo) unos Sultan 85. El patín había aumentado considerablemente hasta los 85 mm y fuera pista se esquiaba muy bien con ellos. Eran cómodos pero a la vez efectivos. Para mí el esquí perfecto en aquella época (dejando de lado que los encuentro bastante feos), que esquiaba cada fin de semana en Boí Taüll y alternaba pista y fuera pista en cada bajada.

Pensaba que ya tenía "el esquí", pero una vez más la evolución sigue su camino y el año pasado me crucé con los Dynastar Powertrack 89 Ti. Los probé en Boí Taüll, donde tenía tan gran recuerdo de los Sultan y la verdad es que lograron eclipsarlos completamente. Tenía en los pies el esquí perfecto para esquiar muy bien fueran cuales fueran las condiciones que tuviera delante. El patín no varía mucho de anchura, pero la incorporación de un buen rocker en la espátula hace que el esquí gane mucho en comportamiendo no sólo en nieves blandas y se coma cualquier irregularidad sin que uno se inmute. He esquiado con ellos por otras nieves y en pista dura también funcionan realmente bien. Tienen buen agarre y unas cotas que los mantienen muy ágiles en el cambio de cantos. Hay que pensar que yo paso de unos SL o GS a estos esquís y sí, obviamente se nota diferencia, pero aguantan muy bien el tipo y funcionan mucho mejor de lo que aparentan cuando los tienes en la mano.
Por nieves sin pisar quieren bajar deprisa. Si estás un poco en forma los disfrutarás enormemente
Vuelve la denominación Powertrack y lo hace por todo lo alto, con un esquí cañero con el que puedes ir a tope por todos lados. Sin pensarlo, hoy este es mi esquí perfecto, que uso cuando hay días de calor con nieve cambiante, cuando voy a meterme por alguna negra sin pisar,...

