Es gracioso como a lo largo de los años hemos ido descubriendo a muchos padres medio desesperados porque sus hijos vuelven del cursillo de esquí con el pantalón mojado. Y cuando les cuentas que le pasa a mucha gente, algunos se alivian. Pues sí, este parece que es un problema que está muy extendido. Y no es cosa de hoy, hace 20 años pasaba lo mismo.
No parece muy difícil de solucionar, pero teniendo en cuenta que son pequeños, que lo están pasando bien y no se acuerdan del tema, si encima hay que sacarse toda la indumentaria para ir al baño, hace que sea más fácil decir que no hay ganas. No sé, creo que en los descansos habría que obligar a todos los niños a pasar por el baño y se acabaría el problema o sería ya muy residual.
Mi humilde consejo. Justo antes de salir de casa, hay que intentar que los niños hagan de todo. Porque luego vienen los nervios y lo que conllevan. Y si el depósito está vacío, todo es más fácil. Y si es posible, que lleven ropa que se puedan sacar ellos mismos de manera fácil. Hay que intentar que se pueda ir al baño sin quitar nada de la parte de arriba, porque si hay que quitarse anorak, forro, tortuga,.. Por eso, llevar peto puede ser un problema.
Como más de uno se ha aliviado cuando le hemos contado que es algo que pasa hasta en las mejores familias y los mejores clubs, lo pongo por aquí, por si sirve de algo.
Y en cualquier caso, nada que una buena lavadora y secadora de ropa (y posiblemente botines) no pueda solucionar. Y sino, siempre podrás recurrir a esos pañales "ligeros" que se pueden llevar con la ropa de esquí sin que apenas se note.
