Este fin de semana he hecho un pequeño experimento con Instagram. Me he dedicado a mirar fotos de estaciones que son familiares para mí y poder sacar algunas conclusiones.
Cuando subimos a esquiar, al menos en nuestro caso, lo que queremos es esquiar. A todos nos gusta que caiga un super paquete, pero queremos esquiar y si hace buen tiempo mejor, sobretodo si vamos con niños o debutantes. Y a no ser que seas un local o casi y sepas dónde hay que meterse, si llegas a una estación y no se ve nada, muchas veces optas por no pagar el ff porque sabes que no vas a disfrutar (o vas con alguien que no lo va a hacer).
Estos días ha nevado como nos gusta (y lo sigue haciendo) en algunas zonas, mientras que en otras que frecuento más, bastante menos. Y por las imágenes que he visto, en unas la gente se ha dedicado a tirar fotos básicamente de carreteras imposibles y coches sepultados y en otras la gente ha podido esquiar. Total, que seguramente unas han vendido ff y las otras no. Y aquí es cuando viene mi reflexión de si tanta nieve es un reclamo o auyenta un poco a algún esquiador, ya sea porque no le gusta esquiar sin visibilidad, nevando o simplemente porque no lleva el coche bien preparado o no le apetece poner cadenas. Sólo hace falta leer algunos comentarios que se pusieron en la noticia que colgué de que venía una buena, que se pensaban seriamente si subir. Vamos, que queremos que nieve pero a veces no siempre nieva a gusto de todos.

A mí cuanta más nieve mejor porque soy de los que no dejo de esquiar por las condiciones (seguro que aquí somos muchos y muchas veces la echo en falta), pero al final esto es un negocio y se trata de que la gente esquíe, no que se vaya a pasear. Me recuerda a una turista que conocimos en Aspen que vivía en Whistler pero que para su semana quería asegurarse buen tiempo y por eso visitaba la estación de Colorado.
En cualquier caso, soy de los que sueñan con repetir una temporada como la del 96, con nieve a raudales para todos.
Y a tí, ¿te afecta el mal "buen" tiempo?