La reina midas del esquí se une a una de las marcas más exclusivas que fabrica ropa de esquí, Jet Set, una casa suiza cuyo origen se remonta a 1969 y que vende sus prendas en destinos como Aspen, St. Moritz, Zermatt o Kitzbühel. Y es que, dejando de lado extravagancias, es junto a Bogner, de lo más esclusivo que se puede llevar a unas pistas de esquí.
De esta guisa (con unos pantalones Jet Set) se paseaba Paris Hilton por Aspen hace un par de temporadas
Lo que parece claro es que no veremos a la reina de las pistas entrenando enfundada en alguna de estas prendas, pero como imagen, aún lesionada, es la mejor embajadora que podían haber escogido en el circo blanco.