Un invierno sin invierno podría ser el eslogan de esta temporada 2018/2019, ya que hasta la fecha está siendo lo más parecido a una primavera avanzada.
Si a finales de octubre la nieve nos hace soñar con un arranque temprano de temporada, los frentes de lluvia del mes de noviembre y comienzos de diciembre dan al traste con un arranque prematuro en el Valle del Aragón, y en todo el Pirineo Aragonés occidental.
Llega el esperado puente de la inmaculada (diciembre) y la estación de Candanchú sigue verde.
Subida en el telesilla hasta Tobazo para comprobar que no hay ni rastro de esa nieve que tanto esperamos. Una buena iniciativa por parte de la estación el poner en funcionamiento el telesilla para uso turístico.
Todo y todos estamos preparados para recibir la temporada con muchas ganas, hasta Candanchú ha almacenado nieve de un año para otro en la zona de pista grande, a 1.500m de altitud recubierta de paja aislante. Guardaron hasta 12.000 metro cúbicos, pero las suaves temperaturas y las lluvias previas imposibilitan el arranque. Sigue avanzando la temporada y el fuerte anticiclón no deja entrar frente alguno, y las suaves temperaturas para la época del año tampoco dejan trabajar a los cañones, por lo que las navidades son verdes también. La reserva de nieve almacenada en el Pirineo Aragonés es una quinta parte con respecto al año anterior, y concretamente en Candanchú para esa época del año han producido unos 3.000 metros cúbicos de nieve, cuando por ejemplo la temporada anterior llevaban 30.000, es decir, ni una décima parte.
Nos encontramos ya en plena Navidad, por lo que las estaciones del Pirineo Aragonés occidental con mucho esfuerzo empiezan a abrir tímidamente, Astún con 15,5kms y Formigal-Panticosa con tan sólo 10 kms un 26 de diciembre. Candanchú intenta abrir el 26 de diciembre, pero no hay condiciones para hacerlo, los 7.000 metros cúbicos almacenados con el snowfarming que estan destinados para cubrir dos pistas y una cinta en la zona de Pista Grande, tampoco es suficiente, y pospone su apertura al 11 de enero.
12 de enero, estreno de la temporada.
Nos plantamos en la recta final de enero y los modelos dan al fin un cambio de tendencia, vuelve la nieve el 21 de enero.
El fin de semana 21 y 22 de enero, al fin podemos esquiar sobre una fina capa de nieve nueva.
La nevada se intensifica por momentos, y la ansiedad crece.
Abandonamos la estación con una sonrisa tras la esquiada, y sobre todo sabiendo que la cosa mejora y bastante.
El fin de semana del 26 de enero, es uno de los buenos en cuanto a condiciones y meteorología se refiere. No pillamos pow, pero si pillamos una nieve rica en los fuera de pista de la estación, ya que el viento la ha compactado bien.
Los descensos son fluidos, y además no hay excesiva gente, por lo que podemos esquiar a placer.
Y así despedimos enero, entre risas y con las piernas a tono.
En febrero las condiciones vuelven a cambiar y los modelos dan una sucesión de frentes con días de nevadas copiosas en nuestras montañas. Una sucesión de frentes (Gabriel, Helena…) azotan la península con un carrusel de temperaturas, donde suben y bajan en función de como rolan las borrascas. Recuerdo que la borrasca Helena, viene acompañada de fuertes nevadas, pero también de fuertes vientos, por lo que hay mucho transporte de nieve. Se alcanzan vientos superiores a los 100km/h, destacables son los 136 km/h de Fisterra, los 129 km/h de Valdezcaray o los 125km/h en Lekeitio.
Helena es una de las máximas aliadas esta temporada y gracias a ella estamos viviendo todavía del esquí, ya que deja mucha nieve. Una borrasca que se forma al noreste de la península del Labrador (Canadá), desplazándose hacia el atlántico y golpeando a Europa occidental.
Las calles de Candanchú 02/02/2019
Nos las prometemos felices y nuestras caras lo delatan, pero tras el paso de los frentes llega la lluvia una vez más.
Detalle de la nieve acanalada tras la lluvia.
Mediados de febrero, la estación parece vestir las mejores galas, pero la nieve con cuidado. En pista es una nieve polvo-dura, de las rápidas, y en fuera de pista algo de polvo espolvoreado sobre una base dura, donde en zonas sale el hielo.
Ester goza en la zona baja de Candanchú.
De visita por Formigal a ver a la family. Bastante buena nieve.
Finales de febrero, luces y sombras, un poco el devenir de la temporada.
Entramos en marzo, el invierno continua en cuanto al calendario, pero las condiciones siguen siendo primaverales. Días de anticiclón, ausencia de frentes, y los Sarrios entiendo que contentos con este invierno, ya que tienen para comer a su antojo.
Cansados de un invierno primaveral, decidimos cambiar de aires, y cruzamos el charco, pero eso será en el siguiente artículo, próximamente.
Ahora a cruzar los dedos y que no sigan rebajando la nieve del frente que llega a partir de esta noche, ya que sino no llegamos a esquiar en semana Santa.
Agradecer la colaboración de Sport Bittl en estos reportajes. https://www.sport-bittl.com/de/