Mi primer "Verano sin invierno"

Este es un verano diferente, dónde los objetivos han cambiado, hace un año me concentraba en hacer el máximo volumen de nieve en los Andes con tal de ganar nivel, hacer desnivel, entrenar y no perder el feeling sobre la nieve. Este verano  me concentro en lo mismo pero de distinta forma, intentando suplir la falta de snowboard y a la vez trabajando 9 horas diarias con tal de financiarme. Aún así a finales de julio tuve la suerte de poder escaparme una semana a Les Deux Alpes gracias a la ayuda de Dalton snowboard Camps, ahí me concentré en hacer half pipe y  en matizar los trucos principales que suelo hacer en las competiciones. Cuando regresé, cambié la tabla por el trabajo, que también me está permitiendo aprender mucho, pero de forma distinta. Lo primero que hice fue organizarme, o en otras palabras "hacerme de entrenadora a mi mi misma. Era importante poder encontrar el tiempo para combinar mi trabajo con esas horas necesarias para entrenar y así cubrir mis necesidades físicas y técnicas de cara a la temporada que viene.

He centrado mi preparación  en tres pilares: resistencia, musculación y entrenamiento específico. En primer lugar la resistencia, parte importantisima para el entrenamiento del freeride, ya sea en esquí o en snowboard tanto para el ascenso a la cara de una competición como para el splitboard o las bajadas donde hay mucho desnivel. El año pasado lo entrené a base de ascender montañas y volcanes andinos con mi splitboard, este verano lo he suplido mediante el trail running y el trekking. A principios de Agosto al tener más tiempo me centré en  hacer desniveles de 900-1500 metros mediante el ascenso a montañas cercanas como el Mortières o Cambre d'Aze. Actualmente dedico 3 días a la semana a trabajar mi resistencia mediante una hora de trail por la montaña, donde hago una media de 10-12km, el objetivo es poder adaptarme a un ritmo cada vez más superior y a mayor altitud, para con ello poder resistir travesías más largas  o con más desnivel.

Mi segundo pilar, la musculación o como yo le llamo: mi 2x1. Le dedico 4-5 horas semanales( 1 hora por día) y lo entreno mediante entrenamientos funcionales o crossfit, como le llaman ahora. El objetivo es fortificar todo el cuerpo pero más especialmente la zona abdominal, lumbar y las piernas con tal de estar suficientemente fuerte para poder  aguantar las recepciones más planas,resistir las recepciones de saltos altos o simplemente tener el cuerpo a tono para que éste pueda resistir cualquier irregularidad con la que pueda encontrarme en una bajada de freeride. Mis entrenamientos funcionales me suelen durar una hora y medio como máximo. Los divido en cuatro bloques: 5 minutos de calentamiento, diez minutos de trabajo abdominal, 15 minutos de técnica, 15-20 minutos de Workout y 10-15 minutos de estiramiento.  En la técnica trabajo los ejercicios más dificiles a efectuar durante el workout para luego tenerlos automatizados y así evitar lesiones, seria como la "parte preparatoria" antes del entreno más duro. La parte del "workout" son esos 15- 20 minutos en los que mediante ejercicios funcionales encarados al snowboard(como saltos, o sentadillas con peso, kettlebell swing...¡hay una infinidad de ejercicios!)  combino el ejercicio aeróbico con la musculación. Esta es mi parte favorita ya que nunca sé que me voy a encontrar pues  el circuito y el formato en el que haré el workout se eligen al azar mediante una app que me he bajado( crossfit WOD roulette). Por ello le llamo "mi 2x1", porque es un entrenamiento físico y psicológico a la vez,  es ese momento del dia en el que me reto a mi misma a superar la barrera del cansacio dando mi 200% sin importar con que circuito me voy a encontrar o su dificultad, es algo que metaforicamente hablando se parece al freeride, pues uno no sabe por donde va a bajar hasta el dia antes y aunque lo sepa tampoco podemos bajar por la cara de la carrera.

Por último, mi tercer pilar; el entrenamiento específico. En él llevo a cabo actividades como el skate, el longboard y a veces el slackline, que se parecen al snowboard y me ayudan a mantener la soltura y familiarizarme con sensaciones similares a la del deslizamiento en la nieve para así no perder la soltura y las sensaciones.  Intento hacer skate en el bowl y pumptrack con el longboard todos los días a no ser que llueva. En el pumptrack me dedico a hacer series de resistencia a máxima velocidad( 2 rondas, reposo de 1 minuto, 2 rondas... y así unas 6 veces). Con el skate me dedico a hacer un poco de todo y disfrutar de este deporte que también forma parte de mi mundo, aprender trucos nuevos, disfrutar y reir con los demás skaters... me centro en soltarme y desconectar de las presiones y el estrés del trabajo, es mi entrenamiento sin tensión, mi happyriding.

En concusión, ha sido un verano muy distinto a los cinco últimos, pero un verano muy necesario que no cambiaría por nada. Al fin y al cabo, he podido gestionar muchas horas de trabajo con mis horas de entrenamiento diario motivándome a mi misma, organizándome y haciendo mis propios programas, vamos, llevando a cabo dos funciones a la vez; la de deportista y la de autoentrenadora, pero más alla de eso he crecido en valores y he dado un paso más en esta ardua tarea de comprender la vida, buscando el querer y saber disfrutar de ella en cualquier momento, encontrando luz hasta en las cosas más pequeñas, las que nos cuesta más apreciar a las personas,  motivo que compensa claramente el no haber podido hacer la doble temporada. Algo es seguro, no he hecho tanto snowboard como hubiera deseado, pero está claro que la temporada de invierno me encontrará bien preparada haha ¡A por ella!