Cómo es habitual, mis veranos no son especialmente playeros, y los fines de semana intento escaparme a hacer rutas por la montaña o en bici.
Ésta vez, Txell y yo no teníamos mucho tiempo y no queríamos hacer un madrugón, así que buscando rutas, cómo las que tenemos cerquita de casa ya están casi todas hechas, nos decidimos a hacer una visita al Valle de Núria, en el Pirineo Oriental.
Allí había estado de pequeñito con la típica excursión de la escuela y también con mis padres, pero de mayor todavía no lo había visitado, así que pensamos que sería buena idea. Cerca de casa, a 1.30h en coche, y un lugar bonito con una estación de esquí escondida bajo montañas de más de 2800-2900m.
Comentar que no se puede llegar en coche. El vehículo se tiene que dejar en Queralbs y luego tienes 2 opciones, subir andando por distintos recorridos o hacerlo en tren-cremallera. Lógicamente, nosotros lo haremos andando, y lo haremos ascendiendo por un lugar menos habitual.
Dejaremos el coche antes de llegar a Queralbs, al lado de una central hidroeléctrica.

Empezamos subiendo al lado del río Freser, quizás os suene este nombre ya que la localidad de Ribes de Freser debe su nombre al río, y quizás también os suene este pueblo ya que de aquí es Núria Pau, nuestra magnífica corredora a la que desde Ferran&Pow aprovecharemos para desearle la mejor de las suertes en la próxima temporada.

El inicio junto al río, es un bonito sendero que transcurre por el medio de un frondoso y verde bosque. Y así seguimos hasta que nos encontramos con el Salt del Grill. A partir de allí, nos desviamos del sendero principal y empezamos a subir por una ardua cuesta sin camino muy marcado pero fácil de seguir.
A medida que vamos ganando altura, podemos observar la preciosidad del valle.


En ésta segunda foto vemos al fondo el collado del que venimos y a la derecha, lo que parece un camino de madera, no es más que una canalización que abastece de agua las centrales hidroeléctricas de Queralbs.
Siguiendo a lo nuestro, cómo no, no paramos de subir...


Hasta que después de muchos metros seguidos acumulados, llegamos a la cota más alta del día, el collado nombrado Les Pedrisses. Ahora sí que podemos decir que tenemos todo el Valle del Freser a nuestros pies.

Mirando al frente, hacia dónde nos dirigimos, tenemos ésta magnífica postal.

Ahora sólo nos queda llanear la ladera hasta el santuario, pero no si antes refrescarnos aprovechando el deshielo.

Hasta que al fin vemos el lugar al que hemos venido, el Santuario de Núria.

Este enclave es ideal para una estación de esquí, pero a mi que me perdonen, desde aquí animo al director de Ferrocarrils de la Generalitat a que monte 3 telesillas en tres de esas montañas vírgenes. Aquí hay muchas hectáreas por explotar!!!

El Santuario es dónde llega el tren-cremallera que sube desde Queralbs, y tenemos zonas lúdicas para distraer a los más pequeños, cómo paseos a caballo, tubbing, patinetes 4x4, el lago para ir en canoa...

Después de una merecida pausa para retomar fuerzas, nos ponemos en marcha de vuelta al coche, el descenso lo realizaremos por el camino antiguo para llegar al Santuario, es el camino más frecuentado por quién quiere subir andando, pero no sin antes ascender a una pequeña peña que nos permitirá gozar de unas vistas inmejorables de todo el Valle de Núria desde su mirador.


Ahora si que sin más dilación, descenderemos todo el valle ya que se avecinan unas nubes que no tienen muy buena pinta...
Durante mucha parte del trayecto, pasamos justo al lado de la vía del cremallera y del río.




Al final, llegamos al coche con un total de 18.5kms andados y unos 1100m de desnivel positivo, Txell en plena forma y la perra y yo arrastrados por ella, jajajaja.
Si os apetece seguir la ruta, la podréis encontrar en mis rutas de wikiloc, y también en strava.
Y si queréis saber más...