Simon Kline se encontraba en la cúspide de su carrera; Alpinista, aventurero y comunicador, había cosechado un éxito sin precedentes en el mundo de las series de televisión, hasta que cometió un error, un grave error que le hundió a nivel personal y profesional. Tras su particular caída hacia el infierno del desprecio y el olvido, Simon tuvo la inmensa fortuna de poder contar con la inestimable ayuda de la doctora Laura Marras, una singular terapeuta cuya vida cambiaría radicalmente tras entrar en contacto con Simon Kline.
Tres años después de la publicación de La Montaña Puede Curar, Víctor Riverola nos presenta una obra coral donde la realidad se mezcla con la ficción, con la intención de transmitir un mensaje de esperanza, motivación y superación personal; Para ello ha contando en esta ocasión con la inestimable colaboración de Jordi Corbella y José F. Romo. En La Montaña y la Vida el lector descubrirá 11 historias reales que destacan por su alto contenido humano y didáctico. Las voces de Rosa, Paula, Pablo, Andrés, Carlos, César, Luis, Paco, Carlo, Juan Manuel y José Francisco, se han convertido en una fuente de motivación y vida mas allá del dolor, la duda y el sufrimiento. Su testimonio nos muestra la montaña como lo que es: un enorme catalizador de emociones, una fuente inagotable de aventuras, ideas y sensaciones indescriptibles. Junto a ellos, una serie de personajes reales y de ficción les acompañarán, ejerciendo la noble labor de compañeros de viaje. A través de su testimonio, el lector descubrirá como la montaña puede llegar a convertirse en una escuela de vida sensacional y en el combustible ideal para que nuestros motores no se paren. También es una escuela de humildad, donde el ser humano, desde su pequeñez, aprende a enfrentarse a sus miedos y obsesiones.
Ya sea corriendo, caminando, trepando, esquiando, saltando. pedaleando o escalando, la montaña es un excelente estadio donde practicar deportes saludables. Además de mejorar los sistemas neurotransmisores, los deportes que se practican en contacto constante con la naturaleza, también tienen otros efectos positivos sobre la salud física y psíquica de las personas, aumentando nuestra capacidad de memoria y concentración y mejorando la atención selectiva. Con el paso del tiempo, nuestra relación con la montaña no hace más que intensificarse, aprendiendo paso a paso, madurando, creciendo, llegando más lejos, más alto…
«Todos vivimos bajo el mismo cielo, pero no todos pisamos el mismo suelo»
Sara Sung
“Sin motivación, no hay vida”
Víctor Riverola
