El apollo XI hizo posible que Neil Amstrong pisara la superficie de la luna en 1969 despues de surcar el espacio los 384.400 kilometros que la separan de nuestro querido planeta.
De todos es conocido la influencia de este pequeño y lejano satelite en la tierra; tanto en la naturaleza como en los hombres. La luna es fuente de inspiración en muchas facetas de la actividad humana. Y como no, en el esquí también.
Cuando tenemos luna llena su luz nos llega de tal forma que sin depender de ninguna luz artificial, podemos ver perfectamente ahí donde pisamos… upsss… ¡ahí donde esquiamos!
La espectacularidad de una bajada nocturna con luna llena es algo sin igual... Imaginate bajar por la pista que has bajado ese dÍa diez veces con sol, pero ahora por la noche, solo con la luna como foco de luz....la luz se refleja en la nieve e ilumina toda la bajada. Todo parece diferente, es la misma pista pero las sencsaciones no tienen nada que ver con lo que tenemos en nuestra memoria «de día».
Estas bajadas con luna llena proporcionan una intensidad y emociones dificiles de describir, en la que durante la bajada todo es nuevo, aunque sea una vieja pista muy conocida.
Las increibles vistas del valle con sus luces centelleando son incomparables. Te envuelve una sensación de soledad, como si estuvieras solo en el mundo, pero una gatificante luz ilumina por alli donde vas a bajar. Esquiar con luna llena no es ni más difícil ni más arriesgado. Es diferente.
Cuando llegas a la cima más alta de la estacion y entras en el refugio, o te quedas en la terraza a ver la puesta de sol, ya entras de lleno en otro mundo. El tiempo pasa lentamente y puedes pasar un buen rato jugando a las cartas con los colegas, paseando por los alrededores, hacer fotos de la puesta de sol o simplemente sentarte con una buena cerveza y ver como el sol se esconde.
A medida que va pasando la tarde y se acerca el momento de la bajada, tus ojos miran incansablemente al cielo. Si hay nubes, esperas con ansiedad que se disipen y cuando finalmente ves como la gran luna aparece en el horizonte detrás de tus montañas favoritas, el subidón de adrenalina es incomparable.
Desde ese momento, aunque aun quede luz solar, tu mente empieza a anticipar la bajada, repasas el itinerario, el material y empiezas a cenar. Después, llega la excitante bajada, que con luna, llena.
Desde que leas el articulo te quedarán cinco lunas esta temporada. ¡No las dejes escapar!
18 de dicembre
17 de enero
16 de febrero
17 de marzo
16 de abril
15 de mayo
Recomendaciones.
Allí donde vayas, si es dentro de una estación de esquí, enterarte de los horarios de las maquinas pisa nieves.
Grupo reducido. Lo ideal es de tres a seis esquiadores.
Llevar baraja de cartas y dejar el móvil a un lado.
Llevar el teléfono bien cargado.
Llevar una buena cámara que haga buenas fotos de noche.
Esquiar con prudencia, sobre todo si es la primera vez.
Bajar despacio. Alargar la bajada con más paradas de lo habitual.
Disfruta y comparte.