Hace unos años, recuerdo leer un artículo en el que hablaban de una victoria de Salva Calvo en la carrera Canfranc-Canfranc. Me puse a buscar algo más de información por curiosidad y encontré el recorrido, con unas cifras que asustan. 42km, 9000m de desnivel acumulado...uffff!! Solo de pensarlo cansaba
Hará un par de veranos empecé a probar esto de salir a correr por montaña. Poco a poco le fui cogiendo el gustillo..y hace poco menos de un año corrí mi primera carrera. Crestas del Infierno este junio, tiradas buenas durante las vacaciones, un buen resultado en la Cercedilla Trail Race...todo en torno a los 30km. El salto natural es empezar a buscar cosas de distancia maratón. Y fue entonces cuando me encontré con la Canfranc-Canfranc 2014. Buena fecha en el calendario, precio muy asequible, y un recorrido al que le tenía muchas ganas...por qué no??
La carrera, este año organizada por el club de montaña Los Arañones, tiene este bonito recorrido/perfil que ya mete miedo:
Hay varios recorridos. El A, distancia maratón, sale de Canfranc y sube a la Moleta, la Raca, el Tobazo y una última trepada al collado de Estiviellas para caer a Canfranc de nuevo. El B (~32km) va con el A hasta Somport y ahí baja hasta Canfranc por el Camino de Santiago. El C y el D (carrera y andada popular) son de 16km en un recorrido circular bajo la Moleta.
El viernes 12, viaje desde Madrid. En el polideportivo del pueblo, recogida de dorsal, bolsa del corredor...y charla técnica, donde nos reciben Fernando, el alcalde, y el organizador . Repaso del recorrido, última hora de meteorología, "repaso" del material obligatorio (agua y unas zapatillas adecuadas ), y a cenar! Pasta party cortesía de la organización.
A las 8 de la mañana del sábado, empezamos a llegar todos a la salida. En la explanada de la Estación, inscripciones de última hora, algunas fotos, y a pasar lista a voces. Sí, a voces, porque entre todas las categorías y recorridos, somos apenas 100 personas.
Llegan las 8:30, nos desean una feliz carrera, y salida! Los primeros 500 metros son por la carretera, hasta que cruzamos el río Aragón y cogemos un bonito sendero que cruza las vías del tren.
Foto: Monrasin
En este tramo la carrera se estira lo suficiente para entrar sin problemas en el sendero que nos lleva a la primera "tachuelita" del día, la Moleta y sus casi 2600m de altura. Paralelos al carretón de Ip, vamos ganando altura rápidamente, dejando muy abajo Canfranc..
Hablando con unos y otros, va pasando el tiempo y salimos del bosque, ya a la altura del carretón. Voy con un mallorquí, es su primera vez por encima de los 1400 metros de altura!! Está encantado con el Pirineo. El último tercio de ascensión se complica un poco, ya con el sol empezando a apretar. Al fin, tras un par de trepadillas, llegamos a la cima. 1h45', y solo llevamos 6,5km 
Foto: Cansamontañas
Tremendas las vistas desde arriba. Collarada, Midi d'Ossau, canal de Izas...merece la pena parar 5 minutos a mirar con la boca abierta 
Siguiente objetivo, el control y avituallamiento del Coll de Ladrones, 8km y unos 1200 metros más abajo. Al principio la bajada es algo técnica, y la señalización era un poco escasa...entre los 3 o 4 que bajábamos juntos conseguimos encontrar el camino y seguir en dirección al refugio Buenavista. Allí la cosa mejora, y se sigue bajando por uno de esos senderos tan típicos del valle, con miles de zetas, buen piso...una maravilla para correr!
Foto: Cansamontañas
Van pasando los kilómetros y llegamos al avituallamiento. Fruta, chocolatinas...recarga de depósito que ahora empieza lo bueno. Apenas un kilómetro de falso llano por el camino de Santiago, nos lleva al sendero que empieza a subir hacia la Raca, 1000 metros más arriba. El sol ya calienta de verdad (son cerca de las 12) y el esfuerzo se empieza a notar.
Foto: Cansamontañas
Pese a empezar fuerte este tramo, me fui desinflando mucho durante la subida. El calor, comer menos de lo que debería...hasta tres veces tuve que parar. Menos mal que el sendero, que trepa por la ladera de la Raca, es otra de esas maravillas "ocultas" de este valle.
Los últimos 100 metros, totalmente en línea recta por la línea de máxima pendiente. Momento duro para tooodos los que ibamos pasando como podíamos.
Desde el control en la cima, se baja por las pistas de Astún hasta el Col du Somport. Y cuando digo por las pistas, digo por el recorrido de las rojas que bajan de la Raca a Pastores, y de ahí al parking. Más de una y más de dos rodillas explotaron en este tramo 
Foto: Monrasin
Somport, km 28 ó 29. Nuevo avituallamiento. Llego justo cuando Andrés, con el que he compartido parte de la subida anterior, sigue hacia Candanchú. Momento serio de duda, seguir por el largo, o bajar con calma y llegar a Canfranc en un periquete por el B...lo segundo es tentador, pero hemos venido a por lo primero. 
Tras un par de kilómetros por la montaña de Pista Grande, toca otro tramo duro, la subida al Tobazo por las pistas de esquí. Creo que nunca he odiado tanto a nadie como en estos escasos 400 metros
Foto: Monrasin
Gel, barrita...todo vale. Voy último, con lo cual prefiero ir con calma para llegar entero, antes que explotar definitivamente a 10 de meta. Siguiente control, en la Tuca...ya se ve Estiviellas!
Una bonita bajada lleva al ahora seco ibón de Tortiellas, bajo el murallón de los Lecherines. Uno de esos sitios donde te da la sensación de que no pasa el tiempo. Fascinante, de veras
Foto: Monrasin
La subida al collado de Estiviellas...es infernal. No deben ser más allá de 300 metros de desnivel, pero entre la fatiga, la pendiente, la falta de sendero...uffff!! Qué duro se hace. Me están esperando en el control del collado para recoger, y uno de los voluntarios me viene a buscar para hacer juntos la última parte de la subida. Desde aquí, gracias de nuevo. Entre la compañía, las vistas y el punch del trozo de chocolate que me ha bajado, llegamos enseguida a Estiviellas.
Foto: Cansamontañas
Desde aquí, solo queda bajar los cerca de 1000 metros que hay hasta Canfranc. Un poco de pausa mientras recogemos el control, y para abajo, que aún queda un rato. La senda va trazando zetas por toda la ladera. 100, 200, 1000, no lo sé. Algún día tengo que subir a contarlas.
Sonia Santander bajando hacia Canfranc. Una de las "culpables" de que acabase la carrera. Gracias por los ánimos. Foto: Monrasin
A ratos andando, a ratos corriendo...van pasando los kilómetros. A unos 1400m, entramos en un hayedo espectacular en el que se puede correr mucho. Qué curiosa es la cabeza y cómo administra el cuerpo. Unos pocos kilómetros antes no podía apenas moverme y en este tramo iba bajando por debajo de 3min/km. Enseguida se sale al pueblo, donde me esperan los de Protección Civil...cruzar la carretera y recta final hasta la estación. Poco más de 10h después, meta
Allí estaba Andrés, que había llegado unos minutos antes, mi padre, el crack de Ramón con la cámara, unos cuantos voluntarios...es lo que tiene ser el último, que todos te esperan!
Según el GPS, 44km y en torno a 3500m de desnivel positivo. No conozco otras maratones duras como son Emmona, Zegama o el MAM, cuyos números son parecidos, así que no se si será la maratón por montaña más dura de España. Pero si no lo es, poco le falta.
Mientras tanto, Sergio Gimeno ya había ganado cuando yo andaba pasando penurias al sol de la Raca. Estratosféricas las 5h15' que tardó, de otro planeta. Aquí tenéis las clasificaciones: http://canfranccanfranc.com/wp-content/uploads/2014/07/Hoja1.pdf
Foto: Monrasin
A posteriori, quizás me precipité inscribiéndome, y seguramente la preparación no ha sido la adecuada, pero sí que es verdad que no me arrepiento. Es una carrera cabrona, pero espectacular. El recorrido, el ambiente que tiene...LOS VOLUNTARIOS. Son los responsables de que la gran mayoría de los populares acabemos siendo finishers . Mil gracias por todo. La charla con unos chavalines del control de la Raca y la silla que me dejaron hicieron maravillas. Desde aquí mi más sincero agradecimiento 
Ahí va un pequeño vídeo con tomas de la GoPro de varias partes de la carrera. Espero que no se haga pesado! 
Sin duda, y pese a todo, de los días más bonitos que he pasado en la montaña. Cuando crucé la meta tenía claro que no volvía...ahora mismo, el sí empieza a coger fuerza. Porque en el fondo, disfruté como un niño con zapatos nuevos. Y de eso se trata, ¿no?
!!Qué deportista!!