Un bosque realmente fascinante, caracterizado por sus abundantes hayas que, en algunos rincones del bosque casi dejan penetrar los rayos del sol. Para acceder a él, el camino más fácil es por Cadanchú lo haremos por la parte del parking de Pista Grande. Dirigiéndonos hacia la pista de fondo dirección al Valle del Aspe. Por el GR11 siguiendo la senda que nos llava hasta el Ibón de Estanés.
También hay otro itinerario a seguir hasta el, que es por Francia, por el Centro Invernal Le Somport haciéndose este más duro. Ahora, las hojas tienen el color verde de la clorofila, pero cuando este bosque está realmente precioso es en otoño, por sus colores amarillos, ocres, anaranjados e interminables rojizos cubriendo completamente el húmedo suelo.
Estos bosques son frecuentes en lugares de humedad y niebla. El Valle del Aspe reúne las condiciones a la perfección. Ya que este valle soporta con frecuencia bancos de niebla humedeciendo este punto geográfico.
