
Río Arc, sábado 15 de febrero
En este invierno atípico, en el que cada nevada viene seguida de lluvia o temperaturas propias del mes de abril, al menos tenemos sol el fin de semana!

Primeros rayos sobre el barrio superior de Bonneval
En plena vorágine de vacaciones escolares francesas, encontrar alojamiento en cualquier sitio para un fin de semana es poco menos que imposible. Pero, cual aldea irreductible de galos, la Haute Maurienne queda al margen.

Solos a ratos
Este fin de semana pasado es el segundo de las vacaciones, el primero con dos regiones "a caballo" (segunda semana para parisinos, primera para marselleses y norteños). Buen tiempo anunciado, y poca nieve en el resto de macizos franceses (Pirineo, Jura, Macizo Central)...Alpes hasta los topes de gente.

Desde lo alto del telesilla de los 3000
Sin embargo, los sábados, días de cambio, se convierten en los mejores días para esquiar en esta época. Entre los que entran y los que se van, los de la zona podemos esquiar a gusto, con una afluencia muy limitada a la que te alejas de las grandes ciudades. Este sábado, aprovechando que dormíamos en Val Cenis, fuimos a conocer la pequeña estación del fondo de la Haute Maurienne, Bonneval-sur-Arc.

La Barre des Ecrins a lo lejos, siempre visible!
Estación pequeña pero cañera, en torno a 30km de pistas y un desnivel de 1200m (1800-3000). Está en el fin del universo conocido, al fondo de la inmensa Maurienne, tras el frío plateau de Bessans (amantes del frío, su estación meteo Romma no os defraudará), y al pie del col de l'Iseran. En cara norte, suele guardar muy buena calidad de nieve y tiene mucho terreno para salir de pista.

Col de l'Iseran y su glaciar de Pisaillas, tan cerquita de las manadas de la Tarentaise

Buena calidad de nieve sumando altura y cara norte
No encontraréis remontes modernos (3 telesillas viejos y lentos, y varios telesquís), pero el ambiente "decadente" de la estación y el lugar en el que se encuentra bien merece una visita.

Telesilla de los 3000

Hacia l'Écot y el nacimiento del río Arc. Italia y el Gran Paradiso tras aquellas montañas.

Ambiente alpino. Pic Regaud (3232m)

Glaciar "suspendido" du Vallonnet
El precio del forfait es muy atractivo (27-29€ en función de la época), con la tranquilidad de poder esquiar sin agobios en un sitio único. Si las condiciones de nieve son buenas, es una buena alternativa a sus vecinas de valle (Val Cenis, la Norma, Aussois, Valfréjus...)

De vuelta a la base
Y si la estación tiene su encanto, el propio pueblo de Bonneval-sur-Arc es de visita obligada. Pese a que nivel climático la Maurienne no es de los sitios que más nieve recibe de los Alpes, este extremo del valle está muy expuesto a lo que aquí se conoce como retours d'Est, nevadones salvajes en Italia cuando la humedad del Mediterráneo entra en acción (nuestras gotas frías/llevantadas). El efecto orográfico y fronterizo es bestial, nevadas de 2m en la frontera y apenas unos centímetros en cuanto te alejas 15-20km. Bonneval, por su situación, queda expuesto a estos episodios, y los episodios clásicos de N-NW le afectan mucho más que sus vecinas al sur, más "protegidas" por las cimas de la Vanoise.

El pueblo de Bonneval

Cuidado con la cabeza...
El pueblo está repleto de pequeños alojamientos y negocios, y transmite en esencia lo rigurosos que son los inviernos en esta esquina de los Alpes. Calles totalmente cubiertas de nieve, entradas excavadas en alguna casa, palas en cada puerta...sensación de frío. Tiene que ser una experiencia curiosa vivir uno de estos episodios de frío/nevadas aquí.

En trineo mejor que en patinete...
Grato descubrimiento esta estación de Bonneval. El día siguiente en Aussois cambió mucho la cosa, ya más gente y la realidad de este invierno en caras sur...escasitos de nieve y sufriendo con isos 0ºC a más de 3000m.
En general, la Maurienne es un valle que bien merece una visita, siempre a la sombra de los grandes dominios de la Tarentaise. Al ser un valle tan inmenso, los dominios de la "entrada" como Sybelles o St François / Valmorel son totalmente diferentes de los Valloire/Galibier o Karellis de mitad de valle, y la Haute Maurienne es directamente un universo diferente. Amantes de los ski safari: es un destino que os deberíais plantear, seguro que más de un clásico de Nevasport coincidirá

La Haute Maurienne, c'est beeeeauuu