Ganador de la Copa del Mundo de boardercross de snowboard la temporada 2014/2015 y doble medallista de plata (individual y por equipos) en los Mundiales disputados en 2017 en la estación de Sierra Nevada (Granada), el donostiarra Lucas Eguibar es una de las figuras más destacadas en el deporte de invierno español. Cumplió 27 años el 9 de febrero y, dos días después, ha (incluso) superado uno de los objetivos que se había planteado este 2021, porque quería hacer un buen papel en el Mundial y se ha llevado el oro. ¿El siguiente? El Globo de Cristal. Su vida está marcada por las curvas, y no sólo en la nieve, como él mismo relata.
¿A qué edad cogiste por primera vez una tabla de snowboard?
Creo que tendría unos 7 años, más o menos. Fue gracias a mi madre junto con un profesor que teníamos. Ella fue la primera en hacer snowboard. Nosotros esquiábamos desde los 2 años y competíamos, pero mi madre quiso probarlo y luego nos ayudó a nosotros.
¿Cómo fue el momento de pasar de aficionado a querer competir?
No hubo un momento en el que me dijera: “¡Voy a ser profesional!”. Yo era aficionado, pero al mismo tiempo competía y, de un año a otro, en lugar de estar entre los cuarenta primeros, pasé a estar en el Top 10. Fue así. Poco a poco vi que se me daba bastante bien y quise seguir. No tuve que dar un paso hacia delante, sino que me fue viniendo poco a poco y, sin darme cuenta, ya estaba dedicándome a esto.
¿A quién admiras dentro del mundo de la nieve?
No sabría decir… Admiro a mucha gente, porque cada uno tenemos una vida diferente y un camino distinto para llegar a donde estamos, y me gusta coger lo bueno de cada persona.
¿A qué estación le tienes un cariño especial?
Hay muchas, pero quizá a Veysonnaz, en Suiza, porque fue donde competí por primera vez en Copa del Mundo, y porque tengo tres victorias y unos cinco podios. Se me da bastante bien.
Un momento en el que lo pasaste muy mal y cómo lo superaste.
En 2013, con el accidente de mi hermano*. Dejé de competir justo antes de los Juegos… Al final fue una situación familiar y hubo bastante trabajo en familia. Nos juntamos mucho, apoyamos a mi hermano, y así, poco a poco, lo superé. Mi hermano fue mejorando y eso es lo que me ayudó a seguir.
(*Nico, el hermano mayor de Lucas, tuvo un accidente de moto por el que estuvo dos meses en coma y que le ocasionó fuertes lesiones cerebrales. Juntos grabaron el corto "Gigantes Paralelos”, dirigido por Lucas Sáez, galardonado con el premio al Mejor Cortometraje y Mejor Guión en la edición de Skimetraje 2015 (Festival Internacional de cortos de esquí y snowboard del Pirineo). Tenéis que verlo si no lo habéis hecho ya. “Si fuera fácil, todo el mundo lo haría... Nadie va a luchar por ti... ¡Pelea! Esto no ha hecho más que empezar". Sólo tenéis que pinchar el enlace).
Un consejo o aprendizaje que te haya sido muy útil a lo largo de tu trayectoria.
Que da igual contra quién me toque competir, si es el número uno del mundo, el dos, o el cien. Yo tengo que hacer mi trabajo, tengo que demostrar lo que he estado entrenando, y ya está. Da igual a quién tenga enfrente. Tengo que ir a hacer mi trabajo y a competir contra mí mismo.
¿Un reto que te hayas propuesto y te quede por superar?
Quedar campeón olímpico. Es un objetivo que tengo que me gustaría cumplir algún día.
Alguna recomendación en la nieve que pueda ser de utilidad.
Estar cómodos con el material que llevamos: con unas buenas botas, fijaciones, tabla… Con una posición cómoda… Ir a hacer snowboard como si fuéramos a andar. Con mis amigos hago mucho hincapié en la posición. Cuando andamos o corremos no vamos mirando al suelo, ni agachándonos, ni nada… ¡Y mucha gente lo hace! Va mirando al suelo y como agachada, y es al revés. Tienes que mirar hacia dónde quieres ir, con una postura normal y relajada.
¿Con quién te gustaría ir a esquiar e invitarías a responder a estas preguntas?
Con Lydia Valentín. Siempre me ha dicho que le gustaría hacer snowboard, así que estaría bien ir con ella porque nos lo pasaríamos genial.
