El Etna, el volcán más activo de Europa, ha vuelto a entrar en erupción, lo que ha obligado a las autoridades italianas a adoptar medidas urgentes de seguridad. La erupción ha provocado espectaculares corridas de lava que han atraído a grandes multitudes de turistas a pesar de los importantes peligros que plantea el fenómeno. Las autoridades advierten de que las explosiones hidromagmáticas (violentas explosiones de vapor provocadas por la interacción entre la lava y la nieve) suponen un grave riesgo para cualquiera que se acerque demasiado.
La viralización de un video que mostraba a esquiadores descendiendo por la nieve mientras los rodeaba la lava del volcán Etna, ha hecho que ahora miles de esquiadores quieran hacer lo mismo. Se calcula que solo este domingo, más de 1.500 personas trataban de hacerse fotos con sus esquís puestos mientras detrás suyo el magma seguía explotando y surcando la montaña.

Esquiador disfruta el paisaje nocturno con nieve y lava
En el volcán Etna se encuentra el centro de ski Etna-Linguaglossa, que de momento no se ha visto afectado por la erupción, pese a que el flujo de lava ya se extiende a lo largo de unos 3,5 kilómetros.
Cientos de turistas bien equipados, guiados por expertos en montaña y vulcanología, se han reunido para observar el evento. Sin embargo, la creciente afluencia de visitantes ha creado un caos en el tráfico. Los informes indican estacionamientos irregulares en carreteras estrechas, rutas bloqueadas y dificultades para los vehículos de emergencia que intentan pasar. La falta de instalaciones públicas, combinada con un número creciente de visitantes después del anochecer, ha aumentado aún más los riesgos de seguridad, en particular los peligros de caídas y de quedar atrapado en la nieve.

El Director de la agencia regional de Protección Civil de Sicilia, Salvo Cocina, señaló:
"hay una afluencia constante de miles de personas, que estacionan salvajemente y caminan por el borde de carreteras estrechas, bloqueando la circulación de vehículos de rescate.
El lunes, ocho personas que intentaban subir a la montaña sin guía se perdieron durante varias horas antes de que los rescatistas las localizaran. El domingo, un hombre de 48 años se fracturó el pie después de caer sobre el hielo.
La presencia de los equipos de rescate, incluidas las ambulancias 4x4 y otros vehículos todoterreno, es importante para quienes trabajan en el volcán y para los guías que están autorizados a llevar a la gente a la montaña. Bloquearlos al no poder pasar por la carretera, crea una situación peligrosa para todos".
