Una conversación en los foros me anima a abordar este tema. Es inevitable empezar por la discusión sobre si los términos en inglés usados a lo loco ayudan o confunden. Ápex viene del latín y significa ápice, o sea, el punto más alto de una figura geométrica. Hasta ahí todo bien, pero el uso de ápex en el inglés específico del esquí no se refiere exactamente a eso, y ahí empiezan los problemas.
El término tiene mucha utilidad en competición, y viene de las explicaciones abstractas, en una pizarra, sobre la línea en una carrera. Los entrenadores empezaron a llamar ápex al punto en que la línea de máxima pendiente era tangente a la curva. Ese lugar de intersección coincide con el momento en que los esquís apuntan hacia abajo, y pasas de viajar a favor de la gravedad a ir contra ella. Su interés conceptual es evidente, pero el problema es que mucha gente se pierde en la traducción de apex (punto culminante, parte más alta de una figura, momento de mayor dificultad…) y entiende otra cosa.

Así, como decimos en el foro, “hablas con compañeros y entienden el apex como la parte de mayor presión (tiene sentido bajo el punto de vista sensorial) o el momento de mayor inclinación, o lo mezclan con el concepto de parte alta de la curva (fase positiva)” pero ninguno de esas concepciones subjetivas coincide necesariamente con el vértice de una curva –o sea, la línea de máxima pendiente- si vas más o menos rápido, si el terreno no es plano o si, sencillamente, vas buscando velocidad o lo contrario, control. En resumen: explican el ápex y cada uno lo entiende en un sitio distinto, juas.
En arquitectura se usa el término vértice para llamar a la parte central, la más alta, de un arco. Es similar en catalán y valenciano, vèrtex, en gallego, vértice, aunque no en vascuence donde creo que se dice erpina. Si tradujéramos literalmente apex del inglés (el término que usaban los entrenadores en la pizarra de la que hablamos arriba) y trasladamos el arco a la pista, la voz más adecuada sería vértice. Como curiosidad, el término vértice de la curva se emplea también en las competiciones del motor. No obstante, juas, juas (y juas) no nos perdamos en las nubes: también es un término abstracto, muy específico y que, seguramente, por eso mismo, va a tener aplicación útil en un aula, con personas de nivel muy alto o en los trazados de alpino, pero pobre en la práctica real del esquí libre. Línea de máxima pendiente o, cuando los pies apuntan ya hacia abajo es lo mismo, pero lo entenderá desde mi abuelita hasta el mejor atleta, sea de alpino o de baches.

¿Cuándo se usa con eficacia vértice, ápex o como quiera que lo queramos llamar?
Es útil como foco externo en los trazados de alpino. El vértice de la curva es el lugar donde quiero que los esquís estén ya apuntando hacia abajo, que suele coincidir -en una curva deportiva- con el momento de mayor deformación y canteo. Imagínate a ti mismo bajando; es bastante eficaz pensar que vas de línea de pendiente a línea de pendiente entre palos (o sea, de vértice a vértice de cada curva). Eso, cuando has adquirido previamente todas las habilidades necesarias (cambias, inclinas, etc…) te hará ir fluidamente de una curva a otra, extender las piernas lateralmente hacia ese punto externo que has imaginado y dosificar la máxima presión en el vértice, dejando a partir de ahí correr los esquís hacia la siguiente.

Visualizar los sucesivos vértices también es aplicable al esquí libre, por ejemplo, en giro corto o en fuera de pista, aunque ahí las condiciones no suelen ser como en el entorno cerrado de un trazado y no siempre es tan eficaz. Por eso, lo que encuentro más fácil es pensar que, cuando los esquís están apuntando hacia abajo, puedo terminar la curva, ya sea buscando frenar más o justo lo contrario, dar salida a esa curva y oponerme a la gravedad lo menos posible.
Mi respeto es máximo para los compañeros que usan la noción del ápex, y más si hacen un esfuerzo aportando conceptos nuevos, pero soy enemigo del abuso del inglés. Es mi segunda lengua, he trabajado años en ese idioma y mi formación, aparte de en deportes, es justamente en filología. Por eso quizás haga tantas bromas -con todo el cariño- con esa lengua. Soy especialmente sensible al uso irracional del inglés, ya que veo como gran parte de la población se encandila con el exotismo pero, en general, lo desconoce y, al final, lamentablemente, nos genera a todos más confusión y ambigüedad que precisión en la comunicación.
Y ya que pertenecemos a una cultura grecolatina que ha creado portentosas obras arquitectónicas, si tuviera que usar el término -que no suelo hacerlo salvo situaciones muy especiales- prefiero vértice, porque imagino arcos de medio punto, rebajado, peraltado, de herradura y toda esa movida de curvas hermosas de radio variable, juas, y me sugiere algo mucho más bello que ese áspero y confuso ápex, traído sin duda con rigor y buena intención, pero apresuradamente del inglés.
Y, bueno, en esquí libre, si en vez de vértice, ápex o como cada uno en su buen criterio quiera llamarlo, decimos cuando los pies apuntan ya hacia abajo, jaja, mucho mejor.
¡Buenas huellas!
Carolo, enero de 2025