1. Los baches son obstáculos
No. Al ojo parecen obstáculos, pero los baches están formados por el paso de otros esquiadores. En realidad, las bañeras son ondulaciones del terreno que facilitan todas las fases de los virajes. Su parte superior es más plana, lo que nos hace decelerar y terminar las curvas con poco esfuerzo. Encima de la loma podemos, además, pivotar e iniciar mejor un nuevo viraje. Lejos de ser un obstáculo pues, y hacer más difíciles las pistas, son una parte del terreno que nos ayuda a controlar la velocidad y a iniciar los virajes con facilidad, siempre, claro, que los empleemos en nuestro beneficio y no tratemos de evitarlos.
2. Hacen falta esquís más cortos
No. Como hemos dicho, los baches se forman por el paso continuo de esquiadores, por supuesto, con esquís de todos los tamaños, algunos, seguramente, muchos mayores que los nuestros. Una bañera media suele tener unos cuatro metros de largo. Al ojo poco entrenado puede parecerle subjetivamente poco, pero la realidad incontestable es que cualquier esquí moderno cabe perfectamente en el surco entre dos bañeras y en la zona de transición entre las mismas.
En esta foto del ilustre forero Jinm descendiendo fluidamente en Sierra Nevada, puede aprecierse la distancia generosa entre las bañeras de este carril de competición. Foto cortesia de la "Enterpise".
3. Hay un sólo sitio por donde pasar los baches
No. Hay muchos sitios, muchas estrategias y muchas técnicas para pasar los baches. Podemos ir rectos por el camino más corto, haciendo curvas redondas por las lomas, saltando de cresta en cresta o deslizando las suelas por el surco. Todas estas técnicas pueden combinarse con conducción o derrapaje, y todo ello en la misma bajada, dependiendo si deseamos ir rápido o despacio, controlar o acelerar. En los baches fáciles y pequeños el mayor control nos lo dará hacer curvas redondas; en los grandes y cortados, derrapar por la línea más directa o saltar de cresta en cresta.
A veces puede ser una buena estrategia saltar de una cresta a la otra para evitar entrar en el surco, por ejemplo si éste está muy cruzado.
4. Hace falta saber hacer giros cortos muy rápido
No. Los baches facilitan la fase de control y de inicio de los virajes, por eso en las bañeras podemos girar más rápido si queremos, porque nos ayudan. En las bañeras no hay que concentrase en girar rápido, sino en estar bien anticipados y, para ello, mejor, en clavar los bastones muy dinámicamente.
5. Para pasar baches lo más importante es aprender a absorber
No. Los principiantes o cualquiera que baje despacio pueden iniciar los virajes por extensión, sin necesidad de absorber. Lo importante es la clavada de bastón que nos dará, como sabemos, flexión articular, angulación, posición adelantada y orientación hacia la siguiente bañera. El foco en el bastón será lo que nos permitirá encadenar curvas y mantenernos dentro de la línea. A medida que vayamos progresando y bajemos más rápido, la absorción será entonces la habilidad principal.
Absorber la compresión es importante, pero mas aún lo es hacerlo en una buena posición. Todo lo necesario para ello, nos lo dará el foco en la clavada de bastón.
6. Hay que pasar los baches muy agachados
No. La posición agachada "constante" es una ilusión óptica: cuando se baja rápido y bien se flexiona mucho, es cierto, pero también se estiran las piernas por igual para poder mantener el equilibrio y el contacto con la nieve. Si no estiramos las piernas tras cada bache, luego no tendremos recorrido para absorber. Además, la fase en la que las piernas están estiradas es mucho más larga que la fase en la que están flexionadas
7. Los baches estropean las rodillas
No necesariamente. Los baches técnicamente bien ejecutados no son más agresivos que cualquier otra modalidad del esquí (o de cualquier otro deporte que se practique con intensidad). En todo caso, la zona que más sufre los impactos y el efecto de las fuerzas externas sobre el centro de gravedad es la zona lumbar y del sacro; de ahí que resulte importante trabajar la musculatura postural.
8. Los que saben bajar baches están descoyuntados, tienen habilidades extraterrestres o, al menos, una condición física excepcional
No. Los corredores de baches son atletas formidables, pero como en cualquier otro deporte. Sin embargo, tanto viejos como niños bajan bañeras con una técnica adecuada por todas las estaciones del mundo. Es más una cuestión relativa de peso-potencia y habilidad que de condición física absoluta. La posición de máxima flexión no es muy distinta de la que cualquiera pueda tener ahora mismo sentado delante del ordenador. Si se tiene suficiente fuerza y flexibilidad para sentarse y levantarse de la silla, se tiene para bajar baches con la técnica adecuada.
Cuando pesaba ciento dos kilos, era capaz de bajar los baches más rápido que hoy, con sólo ochenta y mucho mejor forma física. El resultado del rendimento siempre depende de factores complejos, pero gran parte de la clave en los baches está en las habilidades técnicas y en la actitud mental.
9. Los baches son peligrosos
No. Los estudios, además, demuestran lo contrario. Las estaciones con baches ofrecen dos beneficios principales para la seguridad: primero, por las cualidades educativas de las bañeras los clientes suelen tener mayor nivel. En segundo lugar, la práctica en ese entorno controlado hace que las velocidades relativas sean mucho más bajas que en las pistas pisadas, evitando la nefasta percepción falsa de seguridad que dan los esquís de carving en las pistas anchas.
10. Los baches son una forma antigua de esquiar
No. El esquí moderno se beneficia enormemente de la técnica de absorción y extensión de los baches. El patrón de movimiento de una curva moderna de slalom es prácticamente idéntico al de un viraje en los baches. La diferencia principal es que en los baches no se puede conducir limpiamente por las características del terreno irregular. Estas peculiaridades hacen, también, que esquiar con los pies juntos resulte mucho más eficiente. Incluso la clavada de bastón de los baches modernos de competición es un gesto de “swing” con toque durante o tras el cambio de cantos, muy parecido al que se pueda ejecutar en el esquí deportivo actual.
Y por hoy ya tenemos bastante, juas
¡Buenas huellas!
Carolo © 2013
Fotos © Jan Vokaty y András Vegh.
Las fotos aquí publicadas no son "demostraciones de escuela" y no tienen la intención de servir como modelo, sino como mero refuerzo gráfico para el texto. Tanto las ideas vertidas como las ilustraciones sólo muestran la visión y el estilo personal del autor. El esquí es un deporte complejo y que puede ser arriesgado; su aprendizaje y perfeccionamiento es un proceso continuo en el que todos, autor incluido, estamos inmersos; el lector debe interpretar estos artículos según su mejor criterio de prudencia.
Y aquí una toma subjetiva de nuestro amigo Richard Berguer como abridor en la final de los Campeonatos de Técnica de Japón en 2013