Esquiando junto al paralelo del Círculo Polar Artico, cruzando los dominios de los renos, por los bosques y los miles de lagos donde se dice que habita el mismísimo Papa Noel -cuya residencia se fija en la aldea de su nombre, junto a Rovaniemi-, los participantes de la B2B se enfrentarán a uno de los retos más grandes que puede realizarse en esquí de fondo: 500 kilómetros en siete días, con jornadas de hasta… ¡90 kilómetros!
El esquí de fondo dicen que es el más practicado en el mundo. Aunque en el Sur de Europa es poco practicado y el rey indiscutible es el alpino, en el Norte de Europa y muchos de los países del mundo con abundantes nieves no es así. El alpino es un esquí deportivo y de ocio, pero el nórdico es un modo de supervivencia, un modo de ir al colegio, a la compra y de trasladarse en general.
La Border to Border recorre Laponia, al Norte de los lugares donde precisamente “armados” con esquís de fondo, un escaso cuerpo de francotiradores finlandeses diezmó al Ejército Rojo de Stalin durante la Segunda Guerra Mundial. Stalin se jactó de poder invadir Finlandia en sólo unas horas porque era un país plano, sin fronteras naturales. Pero no contaba con el frío, la peor de las barreras naturales, al que estaban perfectamente adaptados con sus esquís y sus rifles los francotiradores fineses.
En la trigésimo segunda edición de la Border to Border, que comienza la próxima semana en los alrededores de Kuusamo, tomarán la salida cerca de 300 esquiadores de veinte países. España estará representada con 20 participantes, lejos de los 52 alemanes o los 72 finlandeses, pero por delante de países con más tradición como Rusia (12), Suiza (15) o Noruega (7).
Uno de esos españoles será el colaborador de Nevasport Javier Olave, que aunque se define como “novato” en la disciplina –empezó a practicarla el año pasado-, es casi un profesional del deporte con su programa Full Activity. Dentro de él acomete retos como la pasada Everest Trail Race, en la que finalizó una carrera a pie de seis días en el Himalaya, en la que salvó 30.000 metros de desnivel acumulado corriendo a alturas de hasta 4.000 metros.
Olave, que tiene en cartera otros retos de nieve que ya os iremos contando, nos irá relatando las peripecias de su aventura en Nevasport todos los días que la cobertura telefónica se lo permita en Laponia.
Desde Nevasport sólo podemos desearle mucha suerte a él y a los otros 19 compatriotas que tomarán reto en esta tremenda aventura, que seguiremos muy de cerca. ¡Suerte a todos!