Viene de: Patagonia Ski Trip 2022: Chapelco
Otra mañana de madrugada. Cargar los bártulos en el vehículo y buscar la ruta que nos llevará a la ciudad de Bariloche.
Va de nuevo (que ya las fracesitas me gustaron): Rumbo Sur, hermosa Ruta 40. LLegar, alojarse a las apuradas y al cerro. esa misma tarde sigue lo bueno: Cerro Catedral, tercer día, 04 de Agosto.
No fue un viaje facil. Las nevadas este año han sido una bendición. Bención, para los centros de esquí,pletóricos de nieve y esquiadores. Para los pueblos y ciudades brillan de manera especial con su mejor decorado, Y hasta para los que llegado el momento utilizarán las aguas de deshielo para la producción de bienes y servicios, la "economía profunda" si se me permite el concepto. Pero "nieve" y "rutas" no son palabras que se lleven bien. Y en la maravillosa Ruta de los Siete Lagos, si no se toman las precauciones del caso, la tragedia te puede estar esperando en cada curva, en cada subida o bajada.
Bien... nos cuidamos del hielo y la nieve, un viaje de dos horas se transformó en uno de cuatro y llegamos sanos y salvos, a conseguir alojamiento (primera y seguramente última vez que hago esto de llegar a tontas y locas a una localidad turística sin haber reservado antes), y mandarnos al cerro. Rápido, que hay que aprovechar lo que queda del día.
Y por fin, Catedral. Humilde opinión personal, el mejor centro de esquí de Sudamérica. Por desarrollo, cantidad y calidad de pistas, de medios de elevación, gastronomía, escuelas de esquí, rentals, negocios especializados en deportes de invierno, y sigo. Una base con miles de camas como oferta de alojamiento y aún muchas más en la cercana Bariloche, paisajes que quitan el hipo...
Como decíamos en nuestro anterior relato, este fue el invierno del turismo interno. Miles de personas deseosas de disfrutar de las grandes cantidades de nieve caída, acercándose por primera vez o reeditando lo que fácilmente se convierte en una pasión: deslizarse en esquíes o snowboard por esas pendientes nevadas a las que ya solemos extrañar inmediatamente las dejamos. Y sí, la temporada es corta, la espera larga. Insoportable a veces.
Gente, gente y gente. Vehículos que colmaban los grandes estacionamientos tanto el gratuito como el pago, que no son precisamente chicos.
Infaltable, conocer la primera gran obra del Masterplan de modernización del Cerro Catedral, la nueva telesilla "Lenga". Estábamos cerca de mediodía así que más allá de la cantidad de esquiadores en el complejo invernal, la subida desde la base no era un problema, todo fluía con agilidad.
Telecabina Amancay, telesilla Diente de Caballo, camino Central, y ahí está, Lenga, tal como te la presentáramos en el artículo de link semanas atrás. Cuádruple de pinza fija, nueva, flamante.
Para el que piense que es redundante con la silla Nubes, ya que llega a la misma zona, la pequeña diferencia es sustancial. Nubes llega hasta el filo de la montaña, por lo que está muy expuesta a cierres por viento. Lenga, un poco más abajo, bastante más al reparo de estas inclemencias.
Lindas pistas, buenas conexiones con el resto de la montaña y la posibilidad de bajar esquiando hasta la base. El día continuó así, lleno de buenas sensaciones en el lugar que probablemente más se "respire" esquí en toda la montaña argentina. Terminamos tarde, bajamos con otra sonrisa.
Nuestra segunda jornada en Catedral sería luego de un día intermedio disfrutado en Perito Moreno, el centro de esquí de El Bolsón, que relataremos en el próximo capítulo de esta humilde trilogía. Día de una nevada moderada con visibilidad acotada y felicidad extendida.
Quedaban entonces dos jornadas más catando esas nieves patagónicas. Ducha, un buen restaurant y a dormir. Al día siguiente, ya saben: Rumbo Sur, hermosa Ruta 40.