Pasaron meses donde las ilusiones de los amantes de la nieve y del Cerro Catedral experimentaron vaivenes inesperados hasta el pasado año. Luego de la incertidumbre provocada por la irrupción del Covid-19, las nevadas memorables que ha experimentado la montaña hicieron que la ansiedad de cuantos queríamos estar ahí se disparara a niveles inéditos.
Por fin, luego de intensas tratativas llevadas adelante entre la empresa y la autoridad concedente del Cerro, se llegó a un feliz acuerdo al menos para quienes tenían pases de residentes comprados con anterioridad. Este jueves 23 de Julio comenzó, por fin, la temporada en Argentina.
Desde temprano, los ansiosos esperaban, respetando la distancia social, para poder hacer su primera subida de la temporada:
Por fin... ¡para arriba!
Bien valió la espera, los visitantes colmaron sus espectativas y más, seguramente. Años que al menos quien esto escribe, no había visto tanta nieve.
Por supuesto, dadas las circuntancias, las pistas no se vieron con la concurrencia de otros inicios de temporada, situación lógica si evaluamos las condiciones que se acordaron para la apertura.
Se observó el estricto cumplimiento del protocolo de desinfección comprometido. También de responsabilidad de parte de los usuarios para respetar las medidas de distanciamiento y protección.
Será seguramente una temporada atípica esta 2.020, no solo para el Catedral, sino para toda la actividad en el país. Esperemos que el tiempo y las nuevas realidades permitan ir abriendo más sectores, más centros de esquí, que por fin las ventanillas de venta de tickets se habiliten, que el turismo interjurisdiccional también sea autorizado... permitános esperar lo mejor para esta temorada 2.020 que empezó hoy.
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