Esta aventura viene de aquí, y antes, de aquí
Las fuerzas menguaban pero las ganas y el entusiasmo estaban intactos.Luego de las dos inolvidables primeras etapas de nuestro viaje, tocaba visitar el dominio más desarrollado de latinoamérica: Catedral Alta Patagonia.
El a veces inclemente clima patagónico en esta oportunidad nos jugaría una mala pasada. Por momentos, no importaba el sector que visitáramos, mejor disfrutar conscientemente, despacio, con cuidado por nosotros y los demás.



Dos días de bruma, niebla, luz plana. La nube, caprichosa copaba las cotas superior por momentos, media y superior por otros.


Pero Catedral es Catedral. Enorme. De posibilidades infinitas. Difícilmente una nube pueda coartar la visión de todos, todo el tiempo. Y entonces para nuestra segunda jornada en el cerro, los claros aparecieron.
Lo dicho, Catedral enorme, de posibilidades infinitas, dificilmente no se pueda disfrutar durante la estadía de cada visitante de algún evento significativo, imperdible.
En nuestro caso, había que optar entre el "Tetra Catedral", y una fecha del "Campeonato Sudamericano de Big Air". Y nos fuimos para el park.








Fue lindo poder ver a exponentes del continente haciendo sus proezas, en un park impecablemente preparado para la ocasión. Este es otro de los detalles que nos sorprendieron de Catedral. Es un centro de esquí que hemos visitado en varias oportunidades, pero al menos quien esto escribe nunca le había prestado al Snow Park la atención que sin dudas merece. Rampas y aterrizajes de un nivel que solo había visto en el hemisferio norte, y por televisión.
Pero aprovechando los claros que se producían, era el momento de tratar de reflejar una vez más, como ya lo hiciéramos el pasado año, el magnífico lugar donde nos encontrábamos.
Cuando el clima no lo impide, subir por la telesilla Nubes abre todo un amplio abanico de posibilidades de pistas y fuera de pistas, a mi juicio de las mejores de Catedral.







Y es que, por ejemplo desde la magnífica pista "Panorámica", que recorre buena parte del filo de la montaña, aún entre nubes pueden intuírse pistas magníficas y paisajes de belleza única.















Lo voy a repetir una vez más: Catedral es esto, posibilidades casi infinitas. Es casi imposible encontrar un día en que absolutamente toda la montaña esté cerrada por condiciones climáticas. Imposible no encontrar nieve de nuestro agrado. Imposible no poder elegir pistas a nuestra medida o conveniencia, para todos los gustos, para todos los niveles.



Volviendo ya en la telecabina "Amancay", viendo a lo lejos la base más completa del hemisferio, nos queda la sensación de que no importa cuántas veces hayamos ido a Catedral. Siempre se va con la alegría, con las expectativas y los deseos de la primera vez, y se vuelve sabiendo que no será la última.



Luego de nuestra visita a Catedral, era momento de regresar a casa. Pero en un próximo artículo podrán leer, queridos seguidores de este pequeño pero entusiasta espacio que es Nevasport Argentina, sobre otro de los dominios que conocimos. Un lindo rincón de nuestros Andes Patagónicos que amplía aún más las posibilidades de realizar un viaje de esquí completo, variado, épico.