La guía del fuera-pista en Grandvalira
Sin duda, Grandvalira se ha convertido en una de las mayores estaciones del Sur de Europa, tanto por extensión como por servicios. Muchos son los esquiadores que deciden pasar la temporada en este centro de esquí andorrano. Sin embargo, detrás de tantos kilómetros de pistas se esconde un santuario de naturaleza al que solo Grandvalira da acceso. En esta guía te doy todos los trucos para disfrutar al máximo del fuera-pista en Grandvalira.
Hoy en día, es muy difícil presentar Grandvalira sin repetir lo grande que es y cómo mejora constantemente sus servicios. Pero tras los hoteles, los restaurantes y los kilómetros de pistas se esconde una naturaleza indómita a la que podemos acceder con gran facilidad desde los diferentes sectores de la estación.
El esquí de montaña y el fuera pista son parte integrante del ADN de Grandvalira. Pero, como siempre, los verdaderos conocedores de la estación suelen guardar con recelo sus rincones de fuera-pista. Aquí te voy a detallar todos los “spots de freeride” de la estación y como acceder a ellos, ya sea en esquí de montaña o por gravedad (desde los remontes).
La Estación
Es muy complicado hacer una recopilación exhaustiva de todas las zonas de fuera-pista en una estación tan grande como Grandvalira. Por eso, me centro en cada sector y nombro sus posibilidades de la forma más exhaustiva posible. Intento ser breve y claro, con consejos útiles para facilitarte la comprensión y el acceso de cada sector.
Grandvalira se compone de amplios sectores y cada uno ofrece zonas de fuera de pista. Estos sectores se nombran tradicionalmente por las entradas a la estación. Son El Tarter, Soldeu, Encamp, Grau Roig y Pas-de-la Casa. Para acabar con la presentación, me gustaría destacar que es imposible incluir absolutamente todos los sectores de fuera-pista. Muchos de los fuera-pista que indico están fuera de los limites de la estación. Por lo que esta guía va dirigida a esquiadores con experiencia de montaña y conocimientos de seguridad en medio nival.
Los Sectores
Soldeu y El Tarter
Es difícil disociar estos dos sectores, pues van casi de lamano. Son la parte menos alpina de la estación, aunque lejos de ser la menos interesante. Se componen de zonas altas, con lomas redondeadas y zonas bajas boscosas, con más o menos pendiente. Aunque existe algún que otro pequeño cortado, se podría decir que casi todo es esquiable y que tan solo hay que indagar un poco. La gran ventaja de los sectores de Soldeu y El Tarter es que todo es accesible por gravedad.
Lo más conocido aquí son el Pico d’Encampadana y el Bosc de Comellar, que es la zona boscosa en la parte Este del pico que vuelve directamente a la zona de Riba Escorxada. También están las canales que se sitúan justo al lado del telesilla de Llosada (se ven a la izquierda subiendo por el telesilla) y toda la pendiente frente a éstas que sale desde la Tosa dels Espiolets. También desde la Tosa dels Espiolets tenemos una larga zona que sigue por cresta la pista de La Llebre, dirección Noreste, y que nos ofrece toda una zona de pendientes cortas (cara Norte) pero muy divertidas que nos devuelven a la zona de Gall de Bosc y Espiolets. Queda la zona del Forn. Ofrece pequeñas bajadas muy gozosas por medio del bosque (bajo pista Rossinyol) y no es tan frecuentada como el resto.
Permite hacer rondas rápidas y aprovechar una pequeña nevada prácticamente a solas.
Luego en la parte baja de Soldeu y El Tarter, todos los bosques son esquiables y lo mejor es seguir los cortes forestales bajo los telesillas y telecabinas. Tengo que hacer hincapié en que está totalmente prohibido esquiar en el bosque de Gall de Bosc, debido a la protección de los urogallos. ¡Si te pillan, te quitarán el forfait, así que no digas que no estás avisado!
Incluso, existen dos bajadas que te devuelven a la carretera principal. Pero luego tendrás que volver a pie. La primera es una bajada que sale directamente desde el pie del telesilla de la Solana y te lleva directamente por medio de un claro del bosque hasta el Peretol y la segunda sale desde Riba Escorxada por debajo de las pilonas eléctricas hasta Els Plans (muro artificial de escalada que se ve desde la carretera).
Encamp
En esta guía me voy a referir al sector de Encamp como un sector propio. Aunque en realidad, varias de las zonas de las cuales hablo pertenecen a otros sectores. Aquí, apunto el sector de Encamp como una vasta zona que va desde la telecabina de Encamp hasta Solanelles y el Pla de lesPedres. En realidad, para los que conocen la estación, se trata de los valles de enlace entre Grau-Roig y El Tarter.
Como acabo de mencionar, los valles de Solanelles y el Pla de les Pedres son por donde se transita cuando se enlaza entre los dos extremos de Grandvalira. Tanto Solanelles como el Pla de les Pedres ofrecen una multitudde laderas abiertas y fáciles que suelen ser las primeras esquiadas después de las nevadas, debido a la facilidad de acceso y la poca pendiente. Son zonas muy lúdicas para el aprendizaje del esquí de fuera pista.
Pero el sector de Encamp esconde unos de los grandes tesoros naturales de la estación de Grandvalira que no es otro que el valle que desciende desde el Pic Alt del Cubil hasta Encamp. Este valle con el bonito nombre de la Solana de la Baronía ofrece un acceso a tres de los circos alpinos más bonitos y desconocidos de Grandvalira que son Emportona, Ensagents y la Coma dels Llops. No solo son un entorno natural precioso, también ofrecen grandes esquiadas.
Lo mejor es acceder a la zona por la telecabina de Encamp, lo que brinda la oportunidad de estudiar la zona mientras subimos. En primer lugar, existe la posibilidad de subir al Pic Alt del Cubil que culmina a 2831 metros. Para ello, hay que ascender, a pie o con pieles de foca, por la arista, desde la Collada d’Enradort hasta el pico, lo que tarda más o menos una hora (según tu nivel). Desde el Pico, lo tradicional es descender por las palas Noreste que devuelve al Llac del Cubil. ¡cuidado, no bajar directamente por la canal central (Norte) desde el mismo Pico, es muy peligrosa! Sin embargo, desde mi punto de vista, lo mejor es bajar por la cara opuesta (Oeste) que conduce al circo de Emportona y seguir bajando hasta el intermediario de la telecabina. Aquí puedes volver a subir hasta Cortals y repetir, hasta la saciedad.
Existen otras tres variantes por gravedad. Una es bajar directamente desde la collada d’Enradort siguiendo el valle. Pero al final llegas al plano y tienes que remar hasta el intermediario. La dos otras salen desde la Tosa de la Llosada. La más fácil, es salir desde la antena (es la única y muy visible) y seguir pendiente abajo hasta el intermediario. La segunda es más bonita, pero requiere un poco de orientación. Es seguir por el valle de La Llosada desde la Tosa y girar a la izquierda antes de adentrase en el bosque, un pilona hace de referencia para salir de la zona. Luego hay que seguir caminado por la carretera hasta el intermediario. Si , por error, acabas dentro del bosque, tienes que seguir las marcas de senderismo para salir de allí.
Se accede a los preciosos circos de Ensagents y la Coma dels Llops en esquí de travesía, no puedo hacer otra cosa que recomendar la excursión. Pero sin la necesidad de acceder a estos lejanos circos, la zona de la Solana de la Baronia te hará sentir con un verdadero aventuro del freeride. Sin olvidar, que cuando hayas acabado de disfrutar del fuera-pista, también puedes comer en el excelente restaurante del primer piso del edificio de Solanelles. ¡Nada mejor para terminar con un gran día de montaña!
Grau-Roig
Grau-Roig es el sector más visitado por los esquiadores de montaña. Es donde empieza la zona alpina de la estación y ofrece una gran variedad de excursiones. Existen varios sectores de fuera pista por gravedad, como toda la zona boscosa del arrastre de Montmalús, todas las palas accesibles desde el telesilla de Antenes que vuelven a la zona del Parking (alrededor de la pista de Pastora) y la pala de Collblanc. Son todas muy accesibles y quedan una buena opción cuando no podemos acceder a los circos de alta montaña. Pero lo que es realmente interesante en Grau-Roig, es sacar las pieles y salir a foquear.
Es aquí donde muchos amantes de la montaña venimos cuando las condiciones nos lo permiten. Es gracias a la facilidad y rapidez de acceso a los circos de Pessons, de Colells o el Clot de la Menera que podemos acceder a algunos de los mejores terrenos de aventura de la estación de Grandvalira. Aquí lo interesante es que, con ascensos cortos, nos encontramos enseguida en crestas muy cómodas que nos permiten bajar por amplias canales o acceder a un terreno de alpinismo puro. Aunque existen algunos accesos clásicos, es tan simple como elegir -a vista- una ruta y hacerla.
Un gran clásico es subir a la Collada de Montmalús, culminando el pico, y seguir (dirección Este) hasta la canal del Aguila(o Ribuls, según Mapas) para bajarla. Otro ejemplo es hacer el Pico de Manera subiendo por una de las canales laterales y bajar por la otra. Pero también nos podemos complicar un poquito más las salidas y entrar en verdaderos terrenos alpinos, donde tendremos que sacar las cuerdas, crampones y piolets, como podría ser subir por la via ferrata del Bony d’Envalira (¡en invernal!) y bajar esquiando por la cara opuesta. También están las crestas del Pic de Ribuls o de Gargantillar. ¡Pero estas dos últimas propuestas están dirigidas a alpinistas expertos!
También, Grau-Roig da acceso, en esquí de montaña, a dos de las más bellas rutas de Andorra. Aunque es posible hacerlas en un solo día, lo bonito es pasar la noche en un refugio y acabar la ruta al día siguiente. La primera, y la más original, es salir desde Grau-Roig, dirección Suroeste desde el parking, subir por el circo de Pessons, hasta la collada del mismo nombre. Una vez en la collada bajamos por el circo de Ensagents, dirección Noroeste, hasta el refugio. Es un refugio libre, con literas y una estufa de madera. Aquí puedes pasar la noche y al día siguiente bajar por el valle hasta la Solana de la Baronía donde se encuentra el intermedio de la telecabina de Encamp. La segunda ruta es subir hasta el cuello de Montmalús, bajar al lago (de Montmalús) y desde aquí seguir, dirección Este, hasta el Port de Valcivera. Luego, seguir Noroeste, hasta el refugio de la Illa. Se trata de un refugio confortable, totalmente renovado y guardado, donde hay que reservar con antelación. Pero la ventaja es que puedes ir ligero, pues ofrecen todos los servicios. El día siguiente bajas por el valle del Madriu -patrimonio mundial- hasta Andorra-la-Vella.
Pas-de-la-Casa
Pas-de-la-Casa es el paraíso de las compras de electrónica, de alcohol y de tabaco baratos para los franceses. Entre amor y odio, el pueblo suele producir sentimientos contradictorios entre sus visitantes. Sin embargo,es el terreno más alpino de Grandvalira. Es más restringido, porque se trata de un circo cerrado y con mucha roca, pero cuando las condiciones son buenas, puedes hacer muy buenas salidas de esquí de montaña. A nivel de freeride por gravedad, es algo más reducido que los otros sectores. Están las zonas de Pic Blanc y toda la parte entre Antenes y Costa Rodona. Si no, se trata sobre todo de pequeñas palas entre pista y pista. Pero en cuanto calzamos las pieles es otro cantar.
Evidente, justo en la frontera francesa, se sitúa el clásico Pic de Pedrons que se sube y se baja casi por todas sus caras. Pero, en mi opinión, las mejores salidas son las canales que bajan por las diferentes aristas del Pic Negre y del Pic Blanc D’envalira, a los que se puede acceder por la parte de la estación en cuanto al Pic Blanc y desde el Col dels Isards para el Pic Negre. Estos dos picos ofrecen unas canales muy alpinas, en dirección Oeste,que te devuelven al Clot de la Menera. También hay bonitas canales en la cara opuesta del Pic Blanc, dirección al Clot de Les Abelletes. Aunque, seguramente, la mejor opción es subir al Col dels Isards, desde aquí existen un montón de variantes en toda la arista que va desde el Pic Negre d’Envalira hasta el Pic de les Abelletes.
Desde El Col dels Isards se pueden hacer largas excursiones que llevan a España o Francia, por la Portella Blanca. Sinceramente, la excursión más esquiable es bajar desde la Portella Blanca por el valle francés de Campcardós, hasta el pueblo de Porta. Por último, queda toda la cresta que sale desde la carretera del Port d’Envalira al Pic Maià. Desde aquí, se puede volver a Pas-de-la-Casa por las palas del Bullidor. Aunque recomiendo seguir hasta el Port Dret. Pues, ofrece las opciones de bajar hasta Soldeu por las caras Oeste de los Clots del Os y del Massat. Incluso es posible esquiar casi hasta el pueblo francés del Hospitalet de Andorra (hasta la N2) por Portella y la Vall de la Vaca Morta. También, desde el Port Dret, puedes seguir hasta el Circo de Siscaró y volver por la Vall d’Inclés, siendo ésta última la opción más bonita y placentera.
Servicios y enlace
La estación de Grandvalira ofrece una gran variedad de actividades y servicios. Van desde los guías especializados en montaña y en fuera-pista, las rutas marcadas de esquí de montaña, las reservas en el refugio de la Illa, la restauración, la hostelería y el heliesquí. Evidentemente, aquí no puedo enumerar todos los servicios de una de las mayores estaciones del sur de Europa. Sin embargo, la gran ventaja es que solo existe un enlace para reservar cualquier cosa en la estación: La central de reservas Telefono: +376 891 800
Recordatorio de seguridad
¡Es importante recordar que la práctica del fuera-pista conlleva graves riesgos y que es necesario conocer las técnicas de seguridad en montaña antes de iniciarse en esta modalidad!
