- EL CLUB MEDIO NATURAL Y DISCAPACIDAD Y EL GRUPO MILITAR DE ALTA MONTAÑA, LOGRAN EN EL HIMALAYA, LA CIMA DEL ISLAND PEAK DE 6.189 M.
La expedición compuesta por el Club Medio Natural y Discapacidad perteneciente a la Federación Aragonesa de Montaña y el Grupo Militar de Alta Montaña, finalizan con existo su proyecto de ascender el Island Peak, según el programa previsto.
Tras la llegada y preparativos, para lo que se suponía sería un triunfo, nada cambió las apuestas. Los rezos en los molinillos de oración surtieron efecto, pero nada mejor que una buena preparación tanto física como mental de estos dos grandes escaladores deficientes visuales que iban convencidos de su logro, lo que hizo que se cumplieran los pronosticos que desde aquí apostamos, una victoria a la fuerza de la naturaleza y a la discapacidad.
El Trekking resulto ser algo más duro que lo que estamos habituados, aunque hay que decir que las sendas están muy bien cuidadas y cómodas, pero con unas pendientes fuertes y bastante considerables, con otras cimas de menor, y no por ello más fáciles, envergadura conseguidas.
El día 11 de octubre, la deportista con discapacidad visual, Raquel Alejandre; y los guías y miembros del GMAM (Grupo Militar de Alta Montaña): Suboficial Mayor Pedro Arceredillo, Subteniente Moises Gomez y Brigada Manuel Suarez; hollaron la cima del Island Peak (6.189 m), mientras el deportista con discapacidad visual Ricardo García, tuvo que conformarse lamentablemente con llegar al campo base y no poder continuar debido a una infección intestinal que le causo serios problemas.
La tarde anterior se hicieron unos metros de reconocimiento y tras ello llegaron al campo base bastante reconfortados y con la sensación de estar seguros que la cima sería suya.
La excelente meteorología que acompaño durante toda la expedición, ayudo tanto en la aclimatación como en la ascensión.
Las buenas condiciones de la nieve facilitaron la accesibilidad a la montaña, realizando desde el campo base (4.970 m) el ascenso y posterior descenso, en un total de doce horas.
Quizás lo que resulto más duro fue el descenso, pues después de las horas de ascenso y el calor soportado, bajar resultó muy agotador. Como anécdota nos cuentan que cuando llegaron donde se podían quitar los crampones hicieron un pequeño avituallamiento y para celebrarlo además de las correspondientes recargas de vitaminas, se hizo buena cuenta de un jamón de jabugo que les situó de nuevo en la cima.
El resultado para Raquel fue de sensaciones muy buenas tanto a nivel personal como deportivo, no obstante en algún momento llego a pensar que qué hacía allí, no obstante se siente bien y muy contenta de haber logrado esa cima (no tenemos que olvidar que es una persona con discapacidad visual y eso no facilita nada) a pesar de al terminar agotada, no tanto física, sino visualmente, y seguro estoy que pronto nos sorprenderá de nuevo con otra y muchas más.
Agradecimientos al Grupo Militar de Alta Montaña de Jaca (Huesca) por su gran colaboración para hacer realidad esta meta y a los guías de montaña de la zona por su ayuda y colaboración.
Dentro de unos días tanto Raquel como su compañero Ricardo serán entrevistados por la cadena ser y esperamos poder poneros la entrevista al completo.