- Fue eliminado en la segunda manga de la supercombinada
- Se quedó sin poder sumar su cuarta medalla en los Juegos Paralímpicos de Vancouver
- Anna Cohí acaricia el bronce en la supercombinada
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Jon Santacana reconoció sentirse impotente tras haber quedado eliminado de la supercombinada, al sufrir un enganchón en la segunda manga, la del eslalon.
"Poco a poco se te va pasando la rabia, más que rabia es impotencia. Un enganchón te provoca impotencia, una caída es un fallo técnico, pero los engachones son muy frecuentes. Nunca sabes qué va a pasar. En un segunda manga, esto pasa muchísimo, y hay que aceptarlo que la competición es así de dura. Especialmente en el esquí, tu tienes una preparación, pero no sabes qué vas a hacer. De todos modos, se nos irá pasando esta sensación de impotencia de no haber podido culminar los Juegos con otra medalla", comentó.
El esquiador vasco explicaba así lo sucedido: "Es una mezcla de impotencia y rabia. Le perdí un instante y me encontré la puerta entre las piernas, sabes que se te escapa. Luego me lo han dicho y no sabía que llevaba el mejor tiempo intermedio. Tal y como han ido las diferencias entre el primer y el segundo puesto hubiera estado reñido, pero los rivales son duros y muy dignos".
A pesar de este último contratiempo, Jon se mostró satisfecho por las tres medallas conseguidas (un oro en descenso y dos platas en eslalon y gigante) y muy orgulloso.
"Yo venía con mucha ilusión y motivación, pero no calculé qué resultados iba a hacer. Creo que nadie lo hace y si lo hace, sería un engreído y no sabría valorar a los rivales. Todas las medallas nos las hemos jugado en centésimas. Hay que estar muy orgulloso de lo conseguido", dijo.
De hecho, nunca quiso hacer quinielas de las medallas, a pesar de que los periodistas desplazados hasta Vancouver le preguntaron en varias ocasiones. "Yo no pensaba llegar y ganar dos medallas. Luego ganar el descenso eso es algo inimaginale. Fue la carrea de mi vida y así espero recordarla. Han sido unos super resultados", agregó.
"Han sido tres días duros y crean estrés. Ayer ya casi no podía más. Han sido días de poco descanso y mucha tensión. Llegamos con un equipo potente, al final poco a poco ves que sólo tú estás delante y eso crea responsabilidad. Aunque he negociado bien la tensión, ha sido grande. Personalmente quería acabar ya”.
En cuanto a su futuro, la estrella del equipo español sólo piensa en descansar unos días y después ya volverá a la competición. “Me gustaría seguir compitiendo e ir al Mundial de Sestriere. He disfrutado mucho y me gustaría estar ahí, pero dependará del proyecto de la Federación y del Comité, que sea motivador y dé expectativas que si llegamos a Sochi sea en las mejores condiciones. Y no tres medallas, iremos a ganarlo todo".
"Quiero seguir con Miguel. Cambiar de guía sería un pequeño trauma porque llevamos muchos años entrenando juntos y nos conocemos perfectamente. En cuatro años te pudes adaptar pero estar con Miguel es una apuesta segura", concluyó.
La deficiente visual Anna Cohí acarició la medalla de bronce en la supercombinada de los Juegos Paralímpicos de Vancouver 2010, que concluyen mañana, donde la eslovaca Henrieta Farkasova se colgó la medalla de oro.
La catalana y su guía Raquel García habían sido quintas en la manga de supergigante y después de una brillante actuación en el eslalon remontó a la cuarta plaza quedándose a 3.10 del último escalón del podio tras firmar un tiempo total de 2:51.85.
"Esta cuarta plaza supone un empujón, obviamente, pero siempre lamentas no haber conseguido algo más. En el eslalon me he encontrado realmente muy bien, pero no ha sido suficiente", reconoció la joven deportista catalana, que de todos modos hace un "balance positivo" de su actuación.
Por otra parte, Cohí reconoció que esperaba algo más de las carreras técnicas, en las que se llevó "un pequeño chasco" en cuanto a resultados. "Iba a por ellas, pero tuve fallos en la primera manga del eslalon y era imposible remontar. En el gigante en la primera manga fallé mogollón. Pero al final bien", indicó.
Su compañero Gabriel Gorce, debutante y benjamín del equipo, se va "con buen sabor de boca" y un "balance positivo" al tiempo que asegura haber aprendido mucho. "Hay que entrenar mucho para esto y quien menos te esperas sube al podio. Hay que darlo todo hasta el final. Lo que más me ha sorprendido es el nivel de la gente, que ha sido muy alto. El nivel de la gente sube mucho y hay que intentar estar ahí", apuntó.
Gabriel, que fue octavo, entrando en puesto de finalista, ya piensa en los siguientes Juegos de Sochi 2014. "A pesar de los resultados de las anteriores carreras me lo he pasado muy bien y con ganas de repetir dentro de cuatro años y quizás más", apuntó.
Por último, Andrés Boira reconoció no haber alcanzado "las metas que esperaba" aunque hoy le fue "bien". "Hoy se ha dado bastante mejor que las de el eslalon del segundo día, muchos más confiados y la nieve estaba mejor, como nos gusta a nosotros y mucho mejor. Yo creo que más que el mal tiempo nos ha influido con el cambio de disciplinas, nos ha faltado poder entrenar un pelín más y de adaptación aquí", concluyó.
