El esquí me lo ha prestado M+ Store para que lo pruebe y haga este análisis. No han visto el contenido del vídeo o post antes de publicarse.
Después de varios meses con los Rossignol Arcade 84 en mis pies, os traigo una review completa y detalla, aquí tenéis el vídeo para que veais las condiciones en las que lo he probado y a continuación os sigo contando.
Un all-mountain perfecto para pistear
Durante esta temporada 24-25 he podido probar estos Arcade 84 en una gran variedad de situaciones: desde nieve dura al principio del invierno hasta nieve primavera más húmeda, pasando por jornadas de nieve polvo en el Sistema Central. En todas estas condiciones, los esquís han respondido bien, mostrando su carácter polivalente y su enfoque claramente all-mountain.

Donde más destacan los Arcade 84 es, sin duda, en pista. Son esquís ágiles, con buen cambio de canto, estables cuando vas rápido y, sobre todo, muy nobles. Reaccionan de forma predecible y te permiten esquiar con confianza, ya hagas giros medios o largos. La sensación general es la de un esquí pistero con esteroides: algo más de patín, algo menos reactivo, pero igual de divertido si te gusta carvear en todo tipo de nieve.
Fuera de pista: bien, pero con matices
En nieve polvo se defienden, pero hay que ser realistas: no es su terreno natural. El patín de 84 mm y el camber marcado hacen que no floten tan bien como otros modelos más anchos. Se pueden usar fuera de pista, claro, pero hay que ir algo más concentrado y activo con la técnica. Si lo tuyo es el freeride en serio, seguramente haya opciones mejores.

Muy recomendable si buscas tener un solo esquí.
Seamos realistas, si quieres el soñado "One-Ski-Quiver" o como yo lo llamo "Si-Meto-Más-Trastos-En-Casa-Me-Echan", esquiarás principalmente en pista. Y no vas a pillar nieve polvo habitualmente salvo ese día que se alinean los astros y pillas el día perfecto de powder y sol.
Para esos que buscan esquiar fuerte y pistear cómodos con cualquier tipo de nieve, pero sin renunciar a salirse de vez en cuando, los Arcade 84 son una opción muy sólida. Si tu idea de un buen día de esquí es encadenar giros bonitos, mantener control en cualquier nieve y no preocuparte demasiado por lo que venga delante, este esquí te va a encantar.
