Está claro que cuando uno se plantea ir a Japón lo hace pensando en toneladas de nieve polvo. Las fechas eran las idóneas, la zona es la que más precipitaciones recibe de todo Honshu (isla principal de Japón) pero cuando llegas y ves que el primer día hay solazo pues la realidad te da un poco en la cara. De todas formas, acabamos pillando polvo, e hicimos una bajada muy especial por el backcountry de la estación, pero bueno, mejor os dejo el vídeo y lo comprobáis vosotros mismos.
Ya tenemos bastante interiorizado que la vida de Instagram no es la vida real de la gente, que son sus mejores momentos. Sin embargo, con destinos de viaje parece que tendemos a idealizar las condiciones. Pensamos que Japón es nieve 24/7, que los Alpes nunca tienen temporales y visibilidad nula, o en Dolomitas nadie pilla nieve dura como el marmol. Lo que pasa es que eso no se publica. No conozco a nadie que haya estado en Japón 10 días y no haya tenido algún día de sol. Y claro, si llegas al día siguiente del paquetón, queda bastante poco.

Pero bueno, no me puedo quejar mucho porque en realidad sí que encontramos polvo, y supo a gloria después de un día divertido de estación. Madarao Tangram es en realidad la unión de dos estaciones entre las prefecturas de Nigata y Nagano. Tiene bastantes pistas y mucha zona acotada de freeride con cuerdas para delimitar pero suyas entradas no tienen un check de ARVA. Como en casi todo Japón, esquiar fuera de estas zonas está prohíbido y los patrols controlan y advierten, aunque sin hacer demasiado énfasis.

En general, toda la estación está cubierta por bosque bastante denso, y hay que encontrar bien los huecos para disfrutar de las mejores bajadas. A nivel de remontes combinan algunas sillas de 4 desembragables en las zonas bajas, que reparten a la gente por las sillas superiores que son biplazas e incluso una monoplaza. Por supuesto, olvidáos de reposapiés en casi todos los remontes.

También hay posibilidad de hacer esquí nocturno en las pistas principales de ambos sectores de la estación. Para comer hay muchos restaurantes en pistas, en el Hotel Tangram hay un buffet algo carillo pero en el restaurante principal de Madarao, Heidi, podéis comer por menos de 1000 yens (7€) un buen Ramen o un Udon. Me sorprendió lo caro que era el café (¥400).

En próximas entregas veréis que visitamos estaciones más grandes, y otras más pequeñas. Madarao Tangram es un buen término medio, poco turista y muchas posibilidades para esquiar powder (pista: volvimos una semana después). Se ha extendido el concepto de que al japonés no le gusta la nieve polvo, y es cierto que hay muchas familias en fin de semana que no se salen de las pistas. Pero un buen día de paquete vimos a muchos locals y nos encontramos con ellos en las colas antes de que abrieran.

Espero que os haya gustado y si queréis ver la segunda parte, aquí la tienes: Nozawa Onsen.