Cada vez que cae un buen paquetón y la gente se pone a hablar de sus esquís de freeride, de los que les gustaría tener o de los que piensa comprar suele surgir un tema recurrente en la conversación. No me refiero a si más de 100 de patín es demasiado para la península (que no lo es) si no de otro mito más extendido: que los esquís anchos son malísimos para las rodillas y que los que llevamos esquís de 110 dentro de unos años vamos a estar todos con el bastón y los meniscos y ligamentos destrozados.
Seguro que todos habéis visto noticias en las que avisan de los peligros de estos esquís. Los titulares se escriben para incitarnos a darle al botón de compartir sin siquiera leer el contenido de las noticias. Google arroja 8 millones de resultados en inglés si buscamos terminos relacionados y casi todos los resultados parecen tener en común un mismo origen.

En casi todos los artículos se cita o enlaza una web del diario online de la Universidad Estatal de Montana. Si no os funciona el enlace es por la ley de protección de datos europea, os dejo una captura de la noticia completa.
La noticia es de 2015 y es una entrevista resumida en la que el profesor John Seifert afirma que tras 4 años de investigación y de recoger muchos datos, ha llegado a la conclusión de que los esquís anchos dañan las rodillas. Sin embargo, también un poco más arriba dicen que no tienen datos reales de lesiones en las rodillas producidas por los esquís anchos. Por si fuera poco, citan “Ahora mismo, tenemos datos en sentido teórico”.
Al ser una noticia basada en el artículo científico, es lógico pensar que la investigación sería de 2015 o anterior. Sin embargo no está publicado en ningún sitio, normalmente este tipo de artículos están disponibles en pubmed.

Sí que se pueden encontrar otros estudios del mismo autor, por ejemplo, en la web de la Universidad de Montana, tiene un artículo sobre los esquís anchos pero es de 2016, un año después de que se publicara la entrevista en el diario online. El título no hace referencia a las rodillas, si no al trabajo muscular. Podéis echarle un ojo al artículo pero os explico un poco su metodología:
- El sujeto de estudio es una medallista de slalom olímpica de 53 años.
- Hace dos bajadas por un trazado de 13 puertas en una pista pisada de 22º de inclinación (vamos, una pista roja).
- La primera bajada la hace con esquís de 66 de patín y otra con esquís de 95. En total 26 curvas.
- Se le colocan sensores para medir activación muscular de las piernas
Las conclusiones que extraen es que los esquís más anchos la rodilla va en posición más extendida y los gluteos requieren más activación. Vamos, nada relacionado con las lesiones.
En esta ocasión, el profesor cita otro artículo, realizado en la universidad de Ljubljana en 2015 en el que al menos la muestra es un poco más grande. En este caso analizaron:
- Los sujetos son 6 corredores del equipo de demo esloveno.
- Se analizaron en total 180 curvas.
- Se realizaron con esquís de 65, 88 y 110 de patín haciendo giros totalmente conducidos por nieve dura.
Los eslovenos tampoco llegan a ninguna conclusión sobre las lesiones. Efectivamente dicen que la rodilla trabaja con mayor extensión y cerca de los límites de rotación. Pero dice textualmente que el hecho de que los esquís anchos aumenten el riesgo de lesiones degenerativas en las rodillas necesita más justificación. Vamos que no es concluyente en absoluto.

Con este artículo no quiero decir que los esquís anchos sean buenos para las rodillas, simplemente que no se ha demostrado científicamente que sean malos. También es cierto que hacer giros conducidos por nieve dura no es el uso habitual que le da la gente a los esquís anchos por lo que habría que meditar si la metodología aplicada es relevante para el uso real que le damos a estos esquís.
Espero que a partir de ahora reflexionéis un poco antes de compartir titulares sensacionalistas por vuestras redes, porque al final, contribuimos a perpetuar mitos que no tienen base. Si os ha resultado interesante este sí que podéis compartirlo por todos lados, a ver si conseguimos deshacer este mito antes de que quede en la memoria colectiva de la gente y no podamos deshacernos de él.