A principios de los años 80 del siglo pasado se podía circular en motocicleta de gran cilindrada sin protección alguna en la cabeza. Y las imágenes podían resultar muy chocantes, como por ejemplo ver motociclistas en bañador y sin casco por carreteras de la costa en pleno verano… y a gran velocidad. Fue necesaria una campaña de publicidad para, primero extender la concienciación y, después la obligación. Hoy a nadie se le ocurriría subirse a una moto sin casco ni para bajar la rampa de un garaje.
Años después pasó prácticamente lo mismo con las bicicletas, aunque todavía hoy existen algunas excepciones sobre su uso obligatorio
¿Y en el mundo de la nieve? ¿El casco es obligatorio o su uso es solo recomendable? Antes de responder con un simple si o no hay que analizar muy brevemente un poco sobre la cuestión, ya que la respuesta puede ser si o no en función de estaciones de esquí, países, o incluso edades..
El uso del casco en la nieve es relativamente reciente y sobre el terreno no se empezaron a ver con cierta frecuencia, prácticamente, hasta bien entrada la primera década de los 2000. Como dato orientativo, un estudio de Recherche del HSCM de Montreal (Québec, Canadá), afirmaba que en el año 2005 únicamente usaban casco un 9% de los usuarios de una estación, porcentaje que subió hasta el 59% en 2014.
Pero para ser breves hay que decir que, salvo excepciones, el uso del casco para esquiar todavía hoy no es “universalmente” obligatorio.
El uso del casco en la nieve
En cuánto a países existe un poco de todo. En las estaciones de esquí italianas el casco es obligatorio para menores de 14 años. En Austria hasta lo es hasta los quince. En Alemania, Andorra, Francia o España no son obligatorios. En EE.UU. y Canadá va según estaciones y según estados, en el primer caso, o provincias en el segundo, y prácticamente hay que estudiar caso a caso las normativas de uso de las estaciones.Por contra, sí que es obligatorio en todos los países para deportistas profesionales, o sea, esquiadores que compiten o entrenan dentro de un estadio FIS o de un snowpark.
Por supuesto que en los medios de comunicación se ha escrito bastante sobre ello, e incluso debatido en tertulias de radio o visualizado en diversos programas de TV. En el mundo de las redes sociales no han faltado los largos debates en fórums o incluso en vídeos de youtube exponiendo el asunto.
En pistas el uso del casco sigue ganando adeptos entre las nuevas generaciones de esquiadores o snowboarders y entre los adultos posiblemente ya son minoría quienes se suben a un remonte o bajan una pista sin él. Solo con mirar la cola de un remonte cualquiera de nosotros podría avalar esta afirmación.
Sin embargo hay una serie de razones creo que suficientemente objetivas que, al margen de la obligatoriedad o recomendación, nos invitan a su uso. Así pues me atrevo a enumerar las cinco razones lo bastante convincentes para quienes todavía no usan casco para deslizarnos por la nieve.
¿Vamos allá?
Cinco buenas razones para usar casco.
1 • Seguridad
Posiblemente sea la razón número por la cual el uso del casco sigue ganando adeptos. La caída en la nieve o con cualquier objeto mientras nos deslizamos por una pista siempre será con más garantías de protección si llevamos casco. Tampoco podemos obviar una caída a la salida de un telesilla, que podría tener consecuencias fatales si el operador de conducción no se percata de la caída y la silla nos arrolla. Sin descartar la colisión con otro esquiador, no por nuestra culpa, que siempre tendemos a pensar que somos los mejores esquiadores del mundo y muy prudentes, sino porque los hay que todavía no dominan y pueden descontrolarse e impactar contra nosotros.
2 • Personalizables o a la moda
Si eres aficionado al esquí y tienes cierta sensibilidad por la moda seguro que te has pasado un buen rato pensando cuál era el mejor casco para proteger nuestra cabeza. Como pasa con la ropa y los complementos, el casco también sigue tendencias de moda. La elección a la moda puedes pasar por…¿Con visera incorporada o sin ella? ¿Color uniforme o mejor un casco de camuflaje? ¿Liso en protuberancias para pegar mis adhesivos identificativos? ¿Adaptable para funda con orejas de oso panda? En definitiva, el casco de esquí se convierte en una extensión más de nuestra identidad.
3 • Magnífico soporte para la cámara de acción
El casco se ha convertido en un magnífico compañero de grabación de nuestros vídeos de acción. Go-pro popularizó hace unos años la sujeción de la vídeo-cámara en el casco, y lo cierto es que las tomas que se capturan desde el soporte quizás no sean la mejor perspectiva para una panorámica frontal pero si una opción alternativa a llevarla en un peto.
4 • Contra el frío, mucho mejor el casco
El casco nos protege del viento y el frío. Aunque un buen gorro cumple perfectamente sus funciones para aislarnos del frío, lo cierto es que si sopla el viento el casco permite un aislamiento prácticamente total. Si el frío aprieta y encima viene acompañado de viento de norte, el casco es nuestro mejor aliado. ¿Y al llegar la primavera? Quizás sea este su talón de Aquiles aunque no es menos cierto que la evolución de las aperturas diseñadas en los cascos, precisamente para regular la entrada de aire, han mejorado en los últimos años y podemos esquiar agradablemente con nuestra cocorota suficientemente aireada en pleno mes de abril.
5 • Cascos conectados al teléfono
Pues sí. Algunos cascos vienen con la posibilidad de conectarse por Bluetooth a nuestro teléfono móvil. Es una prestación más que nos permite escuchar música o atender a las llamadas de teléfono con la ventaja que se puede hacer sin necesidad de cables. Sin duda alguna se trata de una buena solución para el esquiador o snowboarder empresario o autónomo que requiere atender por teléfono, dónde sea y cuando sea, a sus clientes o proveedores. Y como no, para quienes simplemente quieren escuchar la música almacenada en su teléfono mientras suben por el telesilla.
En conclusión, pues, estas son 5 buenas razones para usar casco para deslizarse por la nieve. Y quien sabe si, tal como hemos explicado en las primeras líneas de este artículo con el caso del uso en las motocicletas, no sería de extrañar que en unos pocos años nos obliguen a todos a usarlo para subir a pistas. ¡Entonces ya serán 6 las razones para el uso de casco!
