Empezamos a pintar sobre un mapa estaciones y valles. Las del valle de Montafon (donde nos alojamos), Damuls (por aquello de ser el pueblo más nivoso de todos los Alpes), Warth-Schröcken (por sus 11m de nieve anuales) aunque ésta última estuviese más retirada…
La realidad superó las expectativas y al final no hizo falta montarse un ski safari que cubriese infinitas estaciones; con dos bastó para la semana: Silvretta Montafon y la joya de Gargellen. Sobre el papel, modesta una y pequeña la otra. Pero estas estaciones guardan mil secretos en forma de terreno y laderas que han dejado vírgenes, a lo sumo con itinerarios balizados, para nuestro disfrute. Con los mapas en la mano, puede llamar la atención la cantidad de itinerarios que tienen marcados. El ratio itinerarios/pistas es bastante elevado. Incluso sorprende que los clasifiquen en distintos niveles de dificultad, siendo los marcados con un “escorpión” los correspondientes a las bajadas más ácidas
Bueno, no me entretengo más. Voy a respetar el formato de mis últimos reports, primero un video y luegos las foticos
A pesar de tener coches, debido al estado de las carreteras muchos días empezaban en la parada de autobús:
Primer día por la estación de Gargellen. Cerrado, esquiando a tientas… pocas fotos hicimos
Reunión en el Hutte a última hora:
Al día siguiente decidimos ir a Hochjoch, integrada en el propio dominio de Silvretta Montafon pero menos “comercial” por decirlo de algún modo. Como apunte, está conectada por dos telecabinas con el resto del dominio, no así por pistas.
Que decir de este día. Cerrado de nuevo, nieve, viento, frío, visibilidad reducida… pero el mejor de todos! Difícil de repetir. Nieve seca como pocas veces y en cantidad. Una silla de 8 nos bastó para divertirnos casi toda la jornada.
Gracias Javi por estar al quite con la cámara en modo ráfaga .
Y empieza el baile, los gritos de felicidad y el “sobacos deep”
Impresionante, en algunos giros te veías metido en una burbuja blanca, incapaz de ver nada hasta que adelantases a esa nieve que acababa de saltar y lo cubría todo.
La estación de Hochjoch tiene dos zonas mal conectadas, con sillas lentas y planazos. En uno de los sentidos hay que atravesar un túnel
Cambiamos a medio día de ubicación, volviendo a encontrar el maná blanco
Diegamen flotando con la Travis…
Aquí una secuencia del becario, se llama DandoMiedo y aún está en periodo de prueba
Veremos si le hacemos de plantilla más adelante, juas…
Venga Fran, sal de la bola de nieve!
Vaya día, ÉPICO!, descojonados acabamos todos
Al día siguiente amanecimos con sol. Hora de probar Silvretta. Vaaaaaamos que se nos va el autobús de menos cuarto!!!
Y a gozar de nuevo. Mucha nieve, no como el día anterior pero igualmente increíble.
Y a darle a los itinerarios. El mismo 55 de la foto discurre por una ladera inmensa, en la que la parte alta consiste en una amplia pala con relativa inclinación para poder bajar dando zapatilla sin demasiadas preocupaciones. La mitad inferior es una sucesión de tubos, con vegetación y rocas donde gana inclinación. Una zona que hacía sacar el mejor (o peor) esquí de cada uno.
Una vista atrás para ver a lo que me refiero:
Un par de bajadas y ya habíamos puesto el ojo en la ladera que se encontraba justo en frente. Vamos que lo trillan todo!
Seguimos buscando donde rascar. Y van saliendo pequeñas palas, bajadas más cortas pero igualmente con oro blanco
El día se va cerrando, aunque aún hay tiempo para hacer nuevos itinerarios
A por el R21 y el R22 con su escorpión. Rokc&rolla!!
Uf, que pintaza tiene esa cresta para ir serpenteando…
Pasada la primera parte, ambos itinerarios confluyen en el valle, donde la pendiente se suaviza. Lo curioso es que para esta parte habían metido la máquina y había pisado el resto para llegar cómodamente a la silla. Así si! Estos montafoneros como saben
Acabamos de nuevo la jornada en el Hutte correspondiente. Mucho desparrame para ser las 5 de la tarde y llevar esa ortopedia de botas puestas
En días posteriores volveríamos a Silvretta. Nevando y las nubes enganchadas en la montaña fueron las condiciones necesarias y mas que suficientes para volver a la zona de “Valisera” y quedarnos al abrigo del bosque. El itinerario R24, la vetusta silla de dos “Garfrescha II” y los alrededores fueron nuestro patio de recreo.
Y allí que pasamos el día, metidos en el bosque, cruzándonos con un grupo de frikiriders suizos, todos equipados con sus mochilas ABS y sus tablones, bajando como si les retirasen a cada giro los pinos que tenían por delante. Apenas tengo fotos, aunque si que quedaron registradas aquellas bajadas en el video que he puesto más arriba.
El último día volvimos Diego, DandoMiedo y un servidor a Gargellen. Anduvimos fantaseando con la idea de ir a Damuls como guinda al pastel, pero el tiempo, el estado de la carretera y el trayecto que suponía en coche nos hizo desistir. Para otro viaje, mejor así!
Los tres allí nos dedicamos a bajar todo lo que no pudimos ver el primer día al no haber visibilidad. Además se nos juntó un local para guiarnos por algunas zonas.
Entorno guapo, muy alpino, con bajadas muy variadas, terreno y desnivel.
Y aquí voy a poner el punto y final.
Un año más hemos podido reunirnos todos o casi todos, compartiendo bajadas, risas y demás con los amigos de siempre y gente que se va incorporando nueva. Muy, muy buena semana en todos los aspectos. Que haya muchas más!
Un abrazo fuerte a los lesionados. A recuperarse pronto y mucho ánimo.
Bueno y como colofón, me despido con un par de imágenes que saqué desde el coche mientras volvíamos a Milán. Como molan las montañas leñe!
Teodulos 2013
Montafon, Vorarlberg
