La eterna pregunta y la misma respuesta, ponte en manos de un buen profesional.
Pues eso hice, cálida tarde de julio en Madrid (cálida por decir algo) me dirijo a la tienda de confianza donde espero que me traten la mitad de bien que el resto de veces que he ido.
Como siempre franqueando la entrada, Ivan, con su sonrisa y atendiendo otra cliente que se va la mar de satisfecha, es lo normal al salir de su tienda. Ivan se me queda mirando a mis antiguas botas que colgaban de mi mano y me pregunta "¿ya vienes para botas no?"
Los primero que me dice Ivan "vamos a probar las que haga falta pero como no me guste como te queda ninguna te vuelves en septiembre y seguimos probando más botas que llegarán" con estas palabras te demuestra que su afán es que el cliente se vaya satisfecho 100%
A partir de aquí un sin fin de pruebas, mediciones y estudios de mi pie. Probar y probar botas, los modelos que Iván creía que me podía ir bien. Casi todos ajustaban bastante bien a mi pie para sorpresa mía, hasta que llegado el momento me sugiere que me prueba unas Atomic Hawk Ultra 130. Me dice "con estás botas te va a ser difícil calzártelas y descalzártelas toda la vida pero creo que te van a ir bien" y como no, un guante a mis pies.
A partir de aquí ienros de explicaciones y los ajustes que Iván ha estimado oportunos. Ahora falta probarlas el domingo en Xanadú gracias a la gentileza de un tío muy grande.
Desde aquí todo mi agradecimiento a Iván y a la gente de Patrick Sport por ser tan grandes profesionales y tratar tan bien a los clientes.