El Verano ya está dando sus últimas bocanadas, y dentro de unos dias estrenaremos el Otoño, con todo lo que ello conlleva para los que amamos y disfrutamos el esquí. Y aunque dicen que la nieve es inodora, nosotros en estos dias podemos “olerla” de lejos, y no es cuestión de fino olfato, es algo mucho más sutil, más de esperanza, más de un deseo acumulado de reencuentro. Los fantasmas del “mono” estival -en algunos casos “gorila”-, se van desvaneciendo, y mentalmente vamos tachando los dias del calendario. Que si quedan 85 dias para las primeras nevadas esquiables; que si ha nevado ya en en los Alpes y en EEUU; que si las previsiones meteorológicas; etc. Todo ello nos da alas para pensar que en 70 días tendremos aquí “paquetones”.
¡¡¡¡ Amigos, es tiempo de Pretemporada !!!.
¿Y qué significa la Pretemporada?. Pues no solo días de tensa espera -si fuera así, sería relativamente facil asumirlo, y no la denominaríamos Pre-temporada-. Y no solo es empezar a buscar ofertas de paquetes de viajes. Y tampoco es solamente escudriñar en las web los precios de los modelos de esquis y de botas, porque los que tenemos pensamos que ya han cumplido su función. Y tampoco es solamente reengancharse nuevamente -y diariamente-, a la web de Nevasport, aunque este punto es importantísimo, pues es el cordón umbilical que nos suministra “alimento” de calidad para pasar el trance (Aunque muchos lo utilizamos todo el año). El
Pre, tiene un significado mucho más amplio y profundo. Es la sala de espera hasta poder acceder a la meta deseada.
El que más o el que menos, cuando terminó la Temporada pasada, dejó los esquis impolutos y bien guardados para el caluroso tránsito del Verano, y que en su momento, respondan a la perfección del exigente esfuerzo que les vamos a solicitar. Con vistas a ese fin, hizo igualmente con las botas; los bastones; gafas; ropa técnica y demás. ¡¡¡¡Que todo funcione debidamente en su momento!!!!.
Todo esto está muy bien. El “material” es una pieza absolutamente necesaria para llevar a buen fin nuestro disfrute, y sobre todo, nuestra seguridad. Pero, ¿qué sucede, y como responderá en su momento, el complejísimo soporte que sustentará -y moverá-, a todos esos elementos?. ¿Estará nuestro organismo – después de una larga temporada afanado en otras “funciones-, con una “puesta a punto” tan perfecta como la de nuestro material?. Esto es sencillamente lo que da sentido al término
Pre, y si somos conscientes -que lo somos-, de lo que nos jugamos, debemos asumirlo y agradecerlo como un
Pre-aviso. Así que, Amigos, pongámonos manos a la obra desde ya, y cada uno, dentro de sus posibilidades (trabajo; hijos y demás), busque un huequecito a diario para poner “a punto” el complejísimo soporte.
Para obtener un resultado más que digno, no es imprescindible “machacarse” en un gimnasio. En nuestra casa, con unos sencillos ejercicios conseguiremos optimizar nuestros músculos; nuestros tendones; nuestras articulaciones y demás. Demos fuerza; flexibilidad; tonicidad y resistencia a todos ellos. De esta forma, cuando subamos a pistas, disfrutaremos plenamente desde el principio, y además, llevaremos dos Seguros de Accidentes: El de la Compañía correspondiente -por si las moscas-, y el nuestro personal e intransferible. Si además, subimos acompañados por la Prudencia, conseguiremos el “no va más”.
Esta “batallita”, -otra más del abuelo-, y por las que os pido disculpas otra vez, no tiene más intención que haceros participes de mi propia experiencia desde los 10 años -ahora con 66-, y después de 56 años practicando este maravilloso deporte, y poniendo todos los medios para que sean algunos más. Siempre esquié como ejercitante turista, que no en competición -que ya me habría gustado-, pero en mis años mozos me decanté por la competición en natación y waterpolo.
Entenderéis, que a mi edad, el sentimiento de alegria que me produce llegar a una nueva Pretemporada en el calendario, en unas condiciones físicas y mentales más que aceptables, no pueda expresarlo en toda su magnitud. Para mi, cuando acaba una Temporada, y si como hasta ahora -y que dure mucho-, las “goteras” propias de la edad, me han respetado, comienza la nueva Pretemporada. Ello significa que me mantengo durante todo el año en un aceptable estado de forma, y no solo para acometer la siguiente temporada en las mejores condiciones dentro de mis posibilidades, sino por aquello de ejercitar un envejecimiento activo. Para ello tengo la gran suerte de disponer de un pequeño -pero bien dotado-, gimnasio indoor en el Centro Social del pueblo (el Centro de la tercera edad), con un precio inigualable de 10 €/año. En él practico, 2 horas todos los días, ejercicios en las máquinas (bicicleta; eliptica; remo; step y cinta), así como jercicios de pesas y banco, todos ellos dentro de un nivel e intensidad acordes con mi edad.
Desde Abril y hasta finales de Octubre, compagino el gimnasio indoor con el que yo llamo “mi gimnasio outdoor”, y que no es más que un paseo al lado del rio del pueblo, que está perfectamente preparado para ejercitar bicicleta y carrera -en mi caso andar rápido, por aquello de no impacto en los tobillos y las articulaciones de las piernas-, además de disponer de aparatos para realizar ejercicios biosaludables. Todo ello en un entorno fantástico (Lo veréis en las fotografias). Así, y entre otras razones, con la ilusión de poder disfrutar del esquí una temporada más, aporto dia a dia una gotita más para conseguir el objetivo que nos propusimos mi mujer y yo hace 5 años -cuando me jubilé-, que decidimos dejar la gran urbe -con todas sus supuestas ventajas-, y venirnos al “agro”. ¡¡¡Mejorar nuestra calidad de vida!!!.
Mi mujer, tambien esquiadora desde los 16 años -cuando nos hicimos novios y le inoculé el “gusanillo”-, con 67 años y tan enganchada al esqui como yo, se prepara exactamente igual que yo, y ya está deseando, que en la cercana estación de Manzaneda -a 40 Km de casa-, caigan los primeros copos.
Feliz y esperanzadora Pretemporada a todos.
EL GIMNASIO OUTDOOR:
¿Quién puede poner algún pero a hacer ejercicio en este entorno?.
EL GIMNASIO INDOOR.
Pequeño, pero matón.
CADA DÍA QUE SUBO A ESQUIAR, NO ME OLVIDO DE IR ACOMPAÑADO POR LA PRUDENCIA.
