Al menos una vez a la semana hay que subir a la sierra. O intentarlo.
La opción más apetecible era irnos para el Almirez. Así que allí nos fuimos Dori, Antonio, Miguel y quien escribe.
Niebla en el corredor, pero estaba disfrutón, con buena huella. Arriba no se veía nada. Así que una vez finalizado el corredor, media vuelta y para abajo por donde vinimos.
Unas fotillos de cómo estaba la cosa. Sin comentarios.
Una buena mañana en buena compañía.
Reportaje completo en
vakavertikal
Saludos a quienes no pudieron acompañarnos, como siempre.
Ta la próxima.