Según informó a Europa Press la directora comercial de la estación, Maite Martí, "Nuestra valoración es más que positiva. Se trata de una muy buena cifra que demuestra que la gente estaba con muchas ganas de venir a esquiar", aseguró Martí, quien reconoció que el buen tiempo también ha influido. El hecho de que sólo estuvieran abiertos 18,5 kilómetros de pistas (en los sectores de Coma Oriola, Cap del Bosc y La Tosa) generó algunas colas en los cinco remontes en funcionamiento, aunque "la gente lo tomó con mucha ilusión teniendo en cuenta, también, que la calidad de la nieve es muy buena", explicó la directora comercial.
La apertura de este fin de semana, que está previsto que se prolongue ininterrumpidamente hasta el final de la temporada, ha supuesto la inauguración más "temprana" en los 41 años de historia de Masella, según apuntó el director de la estación, Xavier Nolla, quien tampoco recuerda otra ocasión tan anticipada "en los cien años de tradición esquiadora en Catalunya".
La puesta en funcionamiento de las 14 pistas ha sido propiciada por las nevadas caídas durante la última semana de octubre y un "frío excepcional" para estas fechas, que ha permitido la fabricación de nieve artificial en las instalaciones. El responsable de la estación recordó que la nieve acumulada, que permite "alargar la temporada por arriba en lugar de por primavera" es una "magnífica" noticia, puesto que esta nieve es de mayor calidad porque "los días son más cortos y las noches, más frías", añadió.
Este año Masella estrena nuevos cañones de nieve artificial, así como mejoras en los tres accesos a las pistas, una inversión de la Generalitat que suma más de 14 millones de euros, según Nolla.
