De todo el conjunto de la escena, la que más llama la atención es la de Skiløperen, y gracias a ella acuden miles de turistas hasta esta isla situada en la localidad de Alstahaug, Noruega. Tal es su fama, que sirvió para realizar uno de los logos de los Juegos Olímpicos de Lillehammer en 1994.
El daño es irreparable. Los chicos, de los que no ha transcendido ni su nombre ni la edad exacta, aunque se sabe que son menores de 15 años, han pedido disculpas, y sus padres, que fueron los que alertaron a la policía, han emitido un comunicado lamentando lo sucedido. De momento no se les ha puesto ninguna sanción, a la espera de evaluar los daños.