El trazado consistía en dos bajadas cronometradas que buscaban no sólo los corredores más rápidos sino también los más completos técnicamente ya que, a los mayores de 10 años, una de las bajadas debía ser de espaldas para los esquiadores o del lado no natural para los snowboarders.
Los juegos comenzaron con un gran juego grupal en el que entre todos los participantes han colaborado para escribir en la nieve con sus esquís y tablas las palabras "World Snow Day" y de esta manera, todos juntos, conmemorar el día mundial de la nieve que se celebraba con más de 600 actividades en todo el mundo.
Posteriormente, se han organizado juegos en los cajones del Snowpark de La Molina en los que se intentaban superar diferentes retos tanto con esquís como con snowboard. Todos los padres y entrenadores han ayudado con sus ánimos y con un gran ambiente a que fuera una gran fiesta para los más pequeños.
Se entregaron regalos a todos los participantes y medallas a los más rápidos, así como premios especiales al esfuerzo y la dedicación y los clubes más comprometidos.
